Madrid,
18 de enero de 2006.- WWF/Adena ha denunciado ante
la Confederación Hidrográfica del
Duero un vertido de una sustancia aceitosa en el
río Riaza en pleno Parque Natural de las
Hoces del Río Riaza, procedente de la Central
Hidroeléctrica de Linares del Arroyo, explotada
por Unión Fenosa. En su escrito, además
de solicitar que se mantengan las medidas adoptadas
hasta eliminar todo el vertido, WWF/Adena solicita
el esclarecimiento de su origen y responsables,
con el objetivo de que no vuelvan a darse episodios
de contaminación como este.
La presencia de aceite fue detectada
el pasado 14 de enero de 2006 por un agente medioambiental
de la Junta de Castilla y León, aguas abajo
de la presa del Embalse de Linares del Arroyo, afectando
a unos 200 m. del tramo medio del Riaza, a la altura
del municipio de Maderuelo (Segovia). El tramo de
río contaminado se localiza en el interior
del Refugio de Rapaces gestionado por la Confederación
Hidrográfica del Duero (CHD) que, junto al
Refugio de Rapaces de Montejo de la Vega, administrado
por WWF/Adena, están integrados en el Parque
Natural de Hoces del Río Riaza.
El escape, que proviene de la
Estación Hidroeléctrica situada a
pie de la presa del pantano y cuya explotación
está concedida a la empresa Unión
Fenosa, ha sido prácticamente controlado
gracias a la rápida intervención de
la guardería de la Junta, así como
de la propia Confederación y de Unión
Fenosa, que han desplegado los medios técnicos
y humanos necesarios para eliminar todo rastro de
vertido.
Hasta el momento no se ha detectado
ningún tipo de afección a la fauna
acuática, si bien es verdad que se desconoce
con exactitud la composición de la sustancia
vertida. Así, en su escrito de denuncia WWF/Adena
reclama que se realicen los oportunos análisis
para determinar cualquier posible afección
a la calidad de agua del río, así
como a la flora y a la fauna existente. Igualmente,
WWF/Adena ha reclamado a la Confederación
la apertura de una investigación, que esclarezca
la procedencia de la sustancia contaminante y determine
los responsables del vertido, tanto para evitar
que se reproduzcan en el futuro, como para que se
aplique la oportuna sanción a la entidad
responsable.
Según María
Melero, Técnico del Refugio de Montejo de
WWF/Adena: “Si bien hay que resaltar la rápida
respuesta de todas las instituciones implicadas
para recoger la sustancia vertida y detectar la
fuente, hechos como este no deben de repetirse en
un espacio natural protegido que alberga especie
tan valiosas como la nutria o el desmán”.
Y continúa: “Por ello, reclamamos a la Confederación
que abra el correspondiente expediente para determinar
el daño causado y la responsabilidad y que
se restaure el medio a su estado anterior”.