02/02/2006
- Manaus - Las tierras indígenas ayudan a
prevenir la deforestación tanto cuanto las
unidades de conservación de uso indirecto,
como los parques nacionales, que no admiten la presencia
de habitantes. Esta es la principal conclusión
de un estudio que comparó la deforestación
dentro y fuera de 121 tierras indígenas brasileñas,
15 parques nacionales, diez reservas extractivistas
y 18 bosques nacionales, entre 1997 y 2000.
"Hay una idea de que la presencia
de personas puede ser perjudicial al medioambiente.
Pero eso ni siempre es verdad", declaró
a Radiobrás el investigador estadounidense
coordinador del estudio, Daniel Nepstad.
Entre 2002 y 2004, investigadores
de siete instituciones brasileñas y estadounidenses
analizaron las imágenes de satélite
y midieron la deforestación en diez kilómetros
para dentro y para fuera de las reservas, a partir
de la línea demarcatoria.
"La deforestación
en el interior de las tierras indígenas fue
diez veces menor que en los alrededores. En los
parques nacionales, fue veinte veces menor la deforestación",
informó el investigador.
"Nosotros somos los verdaderos
ambientalistas y preservadores de la naturaleza.
Tras más de 500 años de invasión
de Brasil, estamos aquí. Y continuamos igual,
sin destruir, sin desmontar", afirmó
uno de los directores de la Coordinación
de las Organizaciones Indígenas de la Amazonia
Brasileña (Coiab), Jenival de los Santos,
de la etnia Mayoruna, que existe desde 1989 y reúne
a 75 organizaciones indígenas representantes
de 165 etnias.