Madrid,
22 de febrero de 2006.- WWF/Adena, con la colaboración
del Ministerio de Medioambiente, ha celebrado hoy
una jornada sobre la Directiva Marco de Agua como
oportunidad de cambio para que la agricultura se
convierta en motor del desarrollo rural sostenible.
La jornada contó con 120 asistentes y la
presencia de D. Jaime Palop, Director General del
Agua, y D. Francisco Amarillo, Director General
de Desarrollo Rural del Ministerio de Agricultura.
Los participantes en el Seminario
de WWF/Adena han identificado estrategias y medidas
para que las subvenciones al desarrollo rural contribuyan
a la conservación de ríos, acuíferos
y humedales, que es la intención de la normativa
europea. El Director General Jaime Palop apuntó
en este sentido: “hay que terminar con la ‘leyenda
negra’ según la cual la política de
agua y, concretamente, la Directiva Marco perjudica
a la agricultura”. Según el Director General
de Agua, esta Directiva Marco de Agua constituye
el único camino para alcanzar el desarrollo
sostenible en el mundo rural.
En la actualidad, la agricultura
afronta importantes cambios y retos, como el desacoplamiento
de las ayudas a la producción, la reforma
de los diferentes sectores y una nueva programación
de fondos para el periodo 2007-2013. Según
Guido Schmidt, Coordinador del Programa de Aguas
Continentales de WWF/Adena, es el momento: “Para
que en España se discuta qué mundo
rural y qué regadíos queremos y para
que converjan las dos políticas y medidas
económicas”.
WWF/Adena ha expuesto en la jornada
sus propuestas de desarrollo rural, subrayando la
necesidad de una mayor presencia de aspectos ambientales,
la importancia de la restauración de los
ríos y la depuración de vertidos de
núcleos rurales, la necesidad de compensar
a los agricultores por la pérdida de rentas
y el apoyo a las alternativas de secano.
Respecto a la modernización
de regadíos, WWF/Adena ha insistido en la
necesidad de que se analicen previamente y de modo
adecuado los cambios de la PAC para verificar la
viabilidad de las explotaciones antes de aplicar
estas inversiones, de hasta 3.000 millones de euros.
De acuerdo con las recomendaciones de la Comisaria
Fischler-Boel, WWF/Adena pide que sólo se
subvencionen las zonas de regadío que ahorren,
por lo menos, un 25% de agua para directo beneficio
del medio ambiente, como puede ser el aumentar los
caudales ecológicos.