23 marzo
2006 - Curitiba, Brasil — Durante la Cumbre sobre
Biodiversidad que se realiza en Brasil, Greenpeace
presentó un informe con mapas precisos de
las áreas de océanos más valiosas
de la Tierra y exigió la creación
de una red global de áreas marinas protegidas.
La velocidad de extinción
de la vida terrestre y marina no tiene precedente
en la historia. La desaparición de especies
animales y vegetales es, aproximadamente, 1,000
veces mayor que en épocas anteriores a la
aparición del ser humano y las predicciones
apuntan a que en 2050 esta tasa sea 10,000 veces
mayor.
Con este mapa ha sido posible
establecer cómo pueden actuar los gobiernos
para proteger los ecosistemas más importantes
del planeta. El hecho de que por primera vez se
disponga de información tan precisa ha motivado
a que Greenpeace apremie a los gobiernos para establezcan
una red de espacios protegidos global y dispongan
de mecanismo de financiación que lo haga
posible.
Los mapas de los océanos
identifican las áreas marinas que necesitan
protección inmediata ante la sobrepesca,
la pesca irresponsable, las prospecciones y la contaminación.
Los mapas evidencian que se puede
establecer una red global de grandes áreas
protegidas en ecosistemas marinos. Si los gobiernos
no la ponen en marcha, dentro de 20 años
se habrá perdido para siempre una gran parte
de la biodiversidad del planeta.
Los gobiernos pueden utilizar
este mapa para establecer la red global de áreas
protegidas marinas. No pueden seguir utilizando
la ausencia de información como pretexto
para no tomar medidas para detener la catástrofe
biológica a la que nos enfrentamos. Si no
lo hacen corremos el riesgo de seguir perdiendo
cada vez más especies y, con ello, haremos
peligrar nuestra propia supervivencia.