15 junio
2006 - Santiago, Chile — Organizaciones ciudadanas
instaron hoy al gobierno chileno a fortalecer la
postura de conservación y uso no letal de
las ballenas en la 58ª reunión de la
Comisión Ballenera Internacional (CBI), que
comienza este viernes en la Isla caribeña
de San Kitts & Nevis. Para esto, las ONGs ambientalistas
se reunieron frente al Palacio Presidencial donde
recolectaron firmas de apoyo, difundieron información
y luego entregaron un regalo a la presidenta de
la República, Michelle Bachelet, pidiéndole
que su gobierno “no le de la espalda a las ballenas”.
La iniciativa también buscó
alertar al gobierno y a la comunidad internacional
acerca de la posibilidad que Japón obtenga
mayoría simple de votos en la CBI a través
de la adhesión de países en desarrollo
que apoyan políticas de caza comercial e
investigación letal a cambio de programas
de financiamiento pesquero, conocido “como compra
de votos”.
La actividad fue realizada por el Centro de Conservación
Cetacea, Centro Ecoceanos, Greenpeace Chile, Oceana
Chile y el Observatorio Latinoamericano de Conflictos
Ambientales (OLCA), e incluyó una exhibición
fotográfica con imágenes sobre las
especies de ballenas presentes en Chile y las operaciones
de caza científica que realiza Japón
en aguas del Santuario Ballenero Austral, recolección
de firmas que posteriormente fueron entregadas en
la Moneda y la entrega de un presente a la Presidenta
Bachelet.
La preocupación de las ONGs en Chile y a
nivel internacional respecto a la influencia del
Estado de Japón y, en particular, de la Industria
pesquera nipona sobre países en desarrollo,
está en el primer plano. Esto porque la CBI
podría convertirse en el primer organismo
internacional totalmente controlado por un solo
país, mediante métodos altamente cuestionados
por la ciudadanía global y significaría
además un retroceso histórico en la
protección de los cetáceos ya que
podrían eliminarse de la Agenda de la CBI
todos los temas vinculados a la conservación
y uso sustentable no letal de cetáceos
Como consecuencia, hitos alcanzados gracias al apoyo
de Chile, como el establecimiento del Santuario
Ballenero Austral, podrían derogarse para
que flotas balleneras extranjeras reanuden la captura
de especies de ballena que actualmente están
siendo utilizadas por los países del hemisferio
sur mediante metodologías no letales.
Las organizaciones además celebraron la decisión
unánime del Senado de la República
que también recomendó al gobierno
mantener una postura acorde con la conservación
y el uso no letal de las ballenas.
Para Juan Carlos Cárdenas, director ejecutivo
del Centro Ecoceanos “fortalecer la posición
chilena es clave y el monitoreo de la ciudadanía
debe ser permanente, pues los países sudamericanos
deben continuar manteniendo su posición conservacionista.
Chile debe seguir respaldando las visiones modernas
acerca del uso sostenible y no letal de las ballenas,
lo cual está acorde con el sentir ciudadano
de proteger la biodiversidad marina en alta mar
y en nuestras zonas costeras, lo cual fortalece
la democracia, la participación y la gobernabilidad
en nuestros mares. Es por eso que prestaremos la
mayor atención a como se desarrolle esta
reunión de la CBI y del comportamiento de
la delegación chilena”.
Bárbara Galletti presidenta
del Centro de Conservación Cetacea, que participa
como miembro de la delegación chilena ante
la CBI, afirmó que “ésta es una oportunidad
fantástica para recordar que el apoyo histórico
de la ciudadanía chilena a la protección
de los cetáceos requiere que el país
consolide una Política de Estado fuertemente
comprometida con su conservación y el uso
no letal, especialmente ahora cuando las poblaciones
de ballenas del hemisferio sur se ven amenazadas
por intereses foráneos que no representan
ningún beneficio social, ambiental o económico
para Chile y la región”.
Juan José Valenzuela, jefe de la campaña
de pesca sustentable de Oceana señaló
que “creemos que es inaceptable la postura de Japón.
Apelamos a la conciencia nacional y el apoyo internacional
para evitar esta práctica fraudulenta. No
es posible que la CBI quede controlada por una sola
nación, más aún tratándose
de un país que carece de conciencia ambiental
y que continuamente ha transgredido los tratados
internacionales, incluida la moratoria a la captura
comercial de ballenas. La cooperación entre
los países pro conservación de cetáceos
es fundamental para el reconocimiento del derecho
soberano de cada país a utilizar a las ballenas
mediante tecnologías no letales, alternativa
que a su vez propende a nuevas formas de desarrollo
económico a través del turismo de
avistamiento en diversas comunidades costeras.”
En tanto para Verónica Vergara, de la campaña
Océanos de Greenpeace Chile “esta reunión
de la CBI es decisiva para el futuro de las Ballenas,
Japón está a punto de obtener la mayoría
simple. Creemos que el gobierno de Chile, en respuesta
a lo que han manifestado en reiteradas ocasiones
los ciudadanos de este país, debe adoptar
un rol más protagónico en la defensa
de nuestro derecho soberano a la conservación
y el uso no letal de las Ballenas, y unirse a los
demás países conservacionistas para
impedir que Japón logre revertir todos los
acuerdos que por años han buscado proteger
a Grandes y pequeños cetáceos”
Por su parte Lucio Cuenca, director ejecutivo de
Observatorio Latinoamericano de Conflictos Ambientales
(OLCA), afirmó que “el tema de la protección
de las ballenas siempre ha estado en la atención
de la ciudadanía y sus organizaciones que
han ido monitoreando el actuar del gobierno chileno.
La defensa de biodiversidad marina, y en este caso
de las poblaciones de ballenas, son también
parte de los nuevos temas que preocupan a nuestras
organizaciones y a los cuales le seguiremos prestando
toda nuestra atención”.