La organización
se reunirá con el Ministerio de Medio Ambiente
a seis días de finalizar el plazo marcado
por la UE para entregar el PNA de derechos de emisión
de gases de efecto invernadero 2008-2012
14 junio 2006 - Madrid, España
— España va a volver a incumplir sus obligaciones
en relación al Protocolo de Kioto. El retraso
del Gobierno en la elaboración del Plan Nacional
de Asignación de derechos de emisión
para el periodo 2008-2012 hace ya imposible cumplir
el plazo del 30 de junio, establecido por la Comisión
Europea para su presentación.
Según la directiva europea,
es obligatorio que el Plan explique cómo
se ha tenido en cuenta la debida participación
de la ciudadanía antes de su publicación.
Sin embargo, cuando solo faltan 12 días hábiles
para el plazo marcado por la Comisión europea,
todavía no se dispone del documento sobre
el cual realizar la consulta.
La información pública
debe ser más rigurosa según la Comunicación
de la Comisión Europea sobre las orientaciones
para elaborar los Planes Nacionales de Asignación
2008-2012 (COM (2005) 703 final). La información
pública es la única herramienta que
tiene la sociedad para poder participar. Hasta la
fecha el Ministerio ha mantenido reuniones formales
con sectores sociales como los sindicatos y las
empresas, dentro y fuera de la mesa de diálogo
social, pero no será hasta el jueves de la
próxima semana cuando recibirá a las
organizaciones ecologistas.
“No puede haber un plan que garantice
el cumplimiento de Kioto sin la participación
de los ecologistas. La elaboración del primer
PNA fue difícil y con prisas, debido a la
situación de abandono en la que el anterior
Gobierno dejó este asunto, pero en la actualidad
no hay excusas para que esto se repita”, ha declarado
Raquel Montón, responsable de la campaña
de Energía y Cambio Climático de Greenpeace.
El pasado 6 de abril, la Comisión
Europea envió un primer apercibimiento a
España debido a la falta de presentación
de información sobre emisiones de gases de
efecto invernadero con respecto al año 2004.
Tampoco se había presentado la información
necesaria para determinar la cantidad atribuida,
esto es la cantidad total que podrán emitir
para cumplir su objetivo de Kioto durante el período
2008-2012. El 15 de mayo se hacían públicas
las emisiones verificadas en 2005, pero por problemas
técnicos, los datos de las instalaciones
españolas no estaban disponibles. A día
de hoy no parece que sea compatible cumplir con
los plazos necesarios para la información
pública y la entrega del Plan en el plazo
que marca la Unión Europea.
Greenpeace considera imprescindible
que este Plan Nacional de Asignación 2008-2012,
que se está elaborando actualmente, sea riguroso
con Kioto como medida inmediata e imprescindible
ante el aumento de las emisiones de gases de efecto
invernadero españolas. En 2004, según
el último dato del Ministerio de Medio Ambiente,
el aumento fue del 48%.
La organización pide al
Ministerio de Medio Ambiente que en el nuevo PNA
no se otorguen más derechos a los sectores
industriales que los correspondientes a sus emisiones
en 11000 incrementadas un máximo del 15%.
Además, se debe ser especialmente restrictivo
en la asignación al sector eléctrico,
que es el que tiene más posibilidades de
reducir emisiones a través de renovables
y eficiencia, para dar mayor margen a los sectores
"difusos" (transporte, vivienda...) donde
será más difícil restringir
las emisiones. "Más renovables y menos
CO2, esa es la única receta para combatir
un cambio climático peligroso", concluyó
Montón.