Investigación
científica en el cañón de Cap
de Creus
Cap de Creus, 14 de julio de 2006.-
Tras cinco día de campaña a bordo
del B/O García del Cid del Consejo Superior
de Investigaciones Científicas (CSIC), los
científicos del Instituto de Ciencias del
Mar de Barcelona (CSIC) han podido determinar la
presencia por primera vez de los corales blancos
de profundidad Lophelia pertusa en la cabecera del
Cap de Creus; esta especie sólo se conocía
en otra localización al sur de Italia. WWF/Adena,
invitada a la expedición, ha podido documentar
el impacto de las redes fantasmas en estas frágiles
y relictas comunidades.
"Por primera vez hemos determinado
la presencia de Lophelia pertusa en una zona tan
al norte del Mediterráneo, un hecho insólito”
comenta el Dr. Josep María Gili, director
del proyecto DEEP CORAL e investigador del Instituto
de Ciencias del Mar de Barcelona (CSIC). “También
hemos podido determinar la presencia de Dendrophyllia
cornigera y Madrepora oculata, otras dos especies
de corales blancos de profundidad raros en el Mediterráneo”.
“Este ecosistema es singular y relicto y debería
ser declarado Reserva de Pesca” añade Pilar
Marcos de WWF/Adena. “Por eso lo hemos incluido
en la propuesta de WWF/Adena para la protección
de 20 paraísos marinos”
"Sabíamos que estaban
amenazados, pero ahora, al visualizar el vídeo
del submarino, la preocupación es mayor",
comenta Pilar Marcos, responsable de Áreas
Marinas Protegidas de WWF/Adena a bordo del García
del Cid "Hay miles de restos de aparejos pesqueros
abandonados ahí abajo, en zonas donde esperábamos
encontrar corales, los corales quedan relegados
a las últimas localizaciones donde la pesca
de palangre de fondo y los arrastreros no pueden
llegar".
Los cables abandonados por los
barcos de palangre de profundidad y las redes de
los trasmallos y los arrastreros hicieron peligrar
la campaña. Uno de los instrumentos fundamentales
para estudiar el estado de conservación de
los corales, el ROV (vehículo submarino controlado
remotamente), ha estado a punto de perderse en dos
ocasiones en el fondo del mar debido a la presencia
de esta “basura” en zonas donde se han encontrado
las últimas comunidades de coral (Madrepora
oculata) en el Cañón del Cap de Creus.
Otros instrumentos como el sensor CTD —que mide
parámetros como temperatura, salinidad y
cantidad de clorofila—, redes de plancton y mapas
3D del fondo oceánico han permitido redescubrir
un ecosistema relicto y, desgraciadamente, muy amenazado.
La importancia de los corales
es fundamental en el cañón del Cap
de Creus, son los bioconstructores fundamentales
en este sistema, ofreciendo estructuras tridimensionales
que constituyen el refugio de múltiples especies,
algunas de gran interés comercial como la
langosta, gamba, pulpo, congrio, etc. Las larvas
de peces y crustáceos crecen y se alimentan
sobre las ramas de los corales blancos, lejos del
sedimento del fondo y donde fácilmente consiguen
alimento directamente de la columna de agua.
“Estamos estudiando el balance
bioquímico del coral para analizar su estado
de salud”, nos comenta el Dr. Gili, sobre la campaña.
“El empleo de estas tecnologías tienen un
coste elevadísimo y los fondos públicos
que se destinan a la investigación marina
española no son suficientes para tener un
conocimiento adecuado de nuestros océanos”.
La presencia de corales no es
aleatoria, se distribuyen en la Península
por determinadas áreas con características
muy específicas. El cañón del
Cap de Creus esconde uno de los 20 paraísos
sumergidos a proteger. Gracias a los nutrientes,
corrientes y la especial morfología, que
se concentran en él hay esta presencia de
corales de profundidad.
El García del Cid finaliza
su periplo y atracará en el puerto de Roses
mañana sábado 15 de julio a las 20:00.
Los periodistas que se desplacen allí podrán
entrevistar a los científicos y a la enviada
de WWF/Adena, Pilar Marcos. Pilar estará
accesible permanentemente en su teléfono
móvil: 650 843 627.
NOTAS AL EDITOR
• La campaña del proyecto
DEEP CORAL del Instituto de Ciencias del Mar de
Barcelona (CSIC) comenzó el pasado día
10 de julio. Desde el puerto de Barcelona, un equipo
multidisciplinar de biólogos marinos, oceanógrafos,
geólogos y técnicos del CSIC, partieron
con rumbo al cañón de Cap de Creus,
a unos 5 km de la Costa Brava, para estudiar los
ecosistemas que habitan en este peculiar fondo submarino
a bordo del B/O García del Cid.
Proyecto DEEP CORAL
• Durante los días de navegación
Pilar Marcos publica un diario blog on-line con
las experiencias diarias a bordo del García
del Cid. Junto con fotos y vídeos de los
descubrimientos de este equipo de expertos marinos.
WWF/Adena ha identificado por
primera vez los lugares marinos sumergidos más
asombrosos, originales y ricos en biodiversidad
en aguas españolas. Entre todos ellos, sus
expertos han elegido 20 lugares amenazados que deben
ser legalmente protegidos lo antes posible y que
van a permitir disponer de una Red de AMP coherente
y representativa de la riqueza marina de nuestro
país. Con esta iniciativa, WWF/Adena pretende
impulsar la puesta en marcha para 2020 de una red
viable, bien gestionada y que cubra al menos un
10% de la superficie de nuestros mares.
La organización ha seleccionado
20 áreas marinas, incluida esta zona que
se está investigando, por varias razones.
Entre otras, que dichos espacios hayan sido parcialmente
preservados de la actividad humana. Asimismo, se
han elegido áreas que sirven de refugio a
especies intensamente explotadas, junto a aquellas
de especial importancia biogeográfica, ecológica,
económica o social. Para hacerlo WWF/Adena
ha creado una cartografía de base propia,
ha identificado las diferentes subregiones marinas,
contando para todo ello con el apoyo desinteresado
de 40 expertos e investigadores marinos.
José Luis García