Madrid,
9 de enero 2007 – La Comisión Europea presentará
mañana miércoles su paquete de propuestas
para lograr una política energética
común en la UE. Ante esta oportunidad, WWF/Adena
pide a la UE que sea ambiciosa y que adopte medidas
concretas para abordar la lucha contra el cambio
climático. Según la organización,
se deben concretar puntos fundamentales como la
reducción de emisiones de gases de efecto
invernadero, el fomento de las energías renovables
y el ahorro de recursos.
WWF/Adena, la organización
mundial para la conservación, pide a la UE
que sea ambiciosa y que ponga en marcha las medidas
concretas necesarias para reducir las emisiones
de gases de efecto invernadero. La UE ha de tener
como objetivo doméstico reducciones del 30%
comparadas con las emisiones de 11000. Un objetivo
por debajo de esa cifra equivaldría al fracaso
de la UE a la hora de cumplir con sus responsabilidades.
“La UE -el bloque industrial y
de comercio más grande a escala mundial,
con casi 500 millones de ciudadanos- puede mostrar
el camino y establecer medidas a largo plazo para
mantener el calentamiento global bajo control”,
afirmó Stephan Singer, Director de la Unidad
de Cambio Climático y energía de la
oficina Europea de WWF. “Los europeos no nos podemos
permitir despertarnos dentro de veinte años
y descubrir que no hemos hecho lo suficiente, porque
en ese momento será demasiado tarde”, concluyó.
El año 2006 ha sido el
más cálido de la historia en algunos
países europeos, tales como Reino Unido y
Holanda, desde que empezaron a medirse las temperaturas
en 1659 y 1706 respectivamente. Reino Unido, Bélgica,
Alemania, Irlanda y Holanda vivieron el mes de julio
con temperaturas más altas conocidas, mientras
que en el centro y el sureste de Europa un derretimiento
extraordinariamente rápido de la nieve y
abundantes lluvias llevaron al Danubio a su nivel
más alto en más de un siglo.
Cabe destacar que el consumo de
energía es responsable del 93% de las emisiones
de dióxido de carbono en Europa, por lo que
se necesitan medidas urgentes en este sector con
el fin de garantizar el desarrollo para futuras
generaciones. No obstante, las infraestructuras
necesarias para llevar a cabo cambios significativos
requieren mucho capital y necesitan una planificación
a largo plazo. Así, es fundamental actuar
ahora y no esperar al futuro.
Según WWF/Adena, la UE
tiene que adoptar un objetivo obligatorio para incrementar
la energía de fuentes renovables (como el
viento, el sol y la biomasa) hasta un 25% de toda
la energía consumida en 2020. Asimismo, debe
acompañar estas medidas de metas específicas
relativas a la electricidad, calefacción
y aire acondicionado, y biocarburantes para tener
en consideración las necesidades de los diferentes
mercados e inversores.
Además, la UE tendrá
que consensuar el objetivo de ahorro de energía
del 20% para esa misma fecha. Este hito se puede
alcanzar mediante la mejora de la eficiencia energética
y el ahorro en los sectores del transporte, en los
edificios y de los equipamientos eléctricos.
Asimismo, se debería empezar
una evaluación del potencial existente en
yacimientos geológicos profundos para almacenar
el CO2 con el objetivo de adoptar una legislación
que haga obligatoria la captura y secuestro de CO2.
De esta forma, para 2020 todas las centrales existentes
que lo emitan estarían obligadas a capturarlo
y almacenarlo.
En cuanto a la opción de
resucitar a la energía nuclear como solución
al cambio climático, WWF/Adena no cree que
sea viable porque aún no se han resuelto
los problemas ligados a sus residuos. Entre sus
principales problemas, cabe citar que es una tecnología
de transición dado que el uranio también
se acabaría en este siglo; se tarda demasiado
en construir las centrales, por lo que no contribuirían
a la lucha contra el cambio climático hasta
después de 2015-2020. Además, son
más caras y desviarían fondos que
estarían mejor empleados en energías
renovables y ahorro energético.
"España iba por un
buen camino en el desarrollo de las renovables,
pero con las últimas decisiones tomadas por
el Ministerio de Industria se puede deshacer parte
del camino andado, al tiempo que se oyen cada vez
más voces pidiendo nuevas centrales nucleares.
No nos engañemos, no se pueden hacer centrales
nucleares y desarrollar significativamente las energías
renovables al mismo tiempo. Apostar por las nucleares
sería coartar el desarrollo de las renovables
que son las únicas sostenibles a largo plazo
y que, según las encuestas, son las elegidas
por el ciudadano”, afirmó Heikki Willstedt,
experto en energía de WWF/Adena.
Artículo: Heikki W. Mesa