Madrid,
22 de enero 2007.- Coincidiendo con la primera reunión
en Japón de las cinco organizaciones regionales
de gestión de los atunes, WWF/Adena presenta
un nuevo informe según el cual las poblaciones
de estas especies están desapareciendo a
gran velocidad en todo el mundo, existiendo ya tres
importantes stocks al borde de la extinción.
Pese a los esfuerzos de algunos
gobiernos, a través de las Organizaciones
Regionales de Pesca (ORPs), las poblaciones de especies
como el atún rojo se encuentran críticamente
sobreexplotadas. Especialmente preocupante es la
situación del atún rojo del Atlántico
Oriental y Mediterráneo, utilizado en la
preparación de sushi y sashimi, que se encuentra
al borde de la extinción comercial debido
a la pesca ilegal masiva en el Mediterráneo.
Las ORPs constituyen el principal
mecanismo desarrollado por los gobiernos para regular
la pesca en aguas internacionales (más allá
de las aguas sujetas a las legislaciones nacionales)
donde se encuentra la mayor parte de los recursos
atuneros. El nuevo documento de WWF/Adena “Tuna
in Trouble: Major Problems for the World’s Tuna
Fisheries” (El atún en aprietos: principales
problemas para las pesquerías mundiales de
atún) revela la rampante Pesca Ilegal, No
Documentada y No Regulada (IUU, en siglas inglesas),
la insostenibilidad de las cuotas y la auténtica
dimensión de una flota inmensa que pesca
un recurso cada vez más escaso.
Raúl García, Responsable
de Pesquerías de WWF/Adena, dijo: “La gestión
sostenible de la pesca de atún en el mundo
sería posible, si existiera voluntad política.
Pero muchos gobiernos ignoran sistemáticamente
las recomendaciones científicas, tal y como
vimos en la reunión de la Comisión
Internacional para la Conservación del Atún
Atlántico de 2006 donde se condenó
a la extinción a nuestro atún rojo”
y añadió: “A menudo los gobiernos
son incapaces de poner en práctica las medidas
de gestión y conservación aprobadas
en las ORPs, ignorando los gravísismos problemas
de pesca ilegal ejercidos por sus propias flotas“.
La capacidad de la flota atunera
mundial es actualmente muy superior a la necesaria
para capturar las cuotas aprobadas y las consecuentes
disputas en la asignación de las mismas tienden
a paralizar las ORPs. A menudo las cuotas son ignoradas
o simplemente se incrementan en contra de las recomendaciones
científicas.
Las ORPs de Atún tampoco
han sido capaces de minimizar las capturas accidentales
de tiburones, tortugas marinas, aves y cetáceos.
En el año 2000 la flota mundial de palangre
para atún empleó 1.200 millones de
anzuelos con un grave impacto en estas especies
no-objetivo.
“Algunas ORPs han desarrollado
un enfoque pesquero más sostenible, aportando
soluciones viables” dijo el Dr. Simon Cripps, Director
del Programa Global Marino de WWF/Adena, “las conversaciones
de esta semana en Japón representan una oportunidad
para que los países interesados adopten practicas
para proteger tanto al atún como a otros
seres marinos, que son destruidos accidentalmente.
Prácticas sostenibles que redundan en la
prosperidad de las comunidades costeras que depende
de este valioso recurso”.
Artículo: Raúl García