Bogotá,
31 de enero de 2007. (MAVDT). Con el objeto de aunar
esfuerzos para orientar y apoyar el desarrollo de
la política de vivienda de manera digna,
permitiendo una convivencia sana y que facilite
el acceso a los servicios institucionales y comunitarios
de apoyo, el ministro de Ambiente, Vivienda y Desarrollo
Territorial, Juan Lozano Ramírez, y la directora
del Instituto de Bienestar Familiar, Elvira Forero
Hernández, firmaron el convenio ‘Pacto por
la Vivienda con Bienestar’.
“Los programas de vivienda social
deben partir del respeto al ser humano. Tenemos
que hacer que la política de vivienda sea
también una política de convivencia
para tener niños, niñas, jóvenes
y familias felices en Colombia, y eso es lo que
buscamos con el convenio con el ICBF”, explicó
el Ministro.
Este pacto se desarrollará
fundamentalmente a través de dos líneas
estratégicas: un mejoramiento de convivencia
intrafamiliar y unas mejores condiciones de habitabilidad
de los hogares.
En la primera de ellas se busca
prevenir el maltrato, combatir la negligencia y
abandono, fomentar la educación sexual mediante
procesos de formación y acompañar
a las familias y quienes cuidan a los niños
y niñas para orientar un buen trato.
En la segunda se busca proporcionar recursos técnicos,
humanos, logísticos y económicos necesarios
para la realización de las actividades del
Ministerio y el Instituto, en las fases de planeación,
organización, ejecución y control.
En tal sentido, el Ministerio
se compromete a acompañar y dar asistencia
técnica y jurídica en los temas de
su competencia para la realización de las
actividades que se deriven del convenio.
Así mismo administrará
los recursos que le sean transferidos para este
fin, en forma directa o a través de convenios
interadministrativos o de cooperación.
Por su parte, el Instituto deberá
acompañar y dar asistencia técnica
y jurídica para la realización de
las actividades que se deriven del convenio a nivel
nacional, regional o local.
Lozano Ramírez, explicó
que existe una apuesta enorme en equidad, en reconstrucción
de justicia social, cuando a los proyectos de vivienda
social se acompañan de parques y alamedas,
de ciclovías, de espacio público para
que los niños, las personas mayores y la
familia toda pueda disfrutar de una calidad de vida
adecuada.
Insistió en que para aquellos
niños a quienes su familia no le puede procurar
en la propiedad privada un espacio adecuado, el
Estado con esta política pública de
vivienda que orienta el esfuerzo a construcción
de ciudades amables, les permite acceder al verde,
al aire puro, a la condición de compartir
en una sociedad equitativa.