04 enero
2007 - España — Amnistía Internacional,
Greenpeace e Intermón Oxfam consideran que
la aprobación del anteproyecto de ley es
un buen punto de partida, aunque debe ser notablemente
mejorado durante el trámite parlamentario.
Amnistía Internacional,
Greenpeace e Intermón Oxfam consideramos
que la aprobación en Consejo de Ministros
el pasado 29 de diciembre del anteproyecto de ley
sobre control del comercio exterior de material
de defensa y de doble uso es un buen punto de partida,
aunque debe de ser notablemente mejorado durante
el trámite parlamentario, sobre todo en los
aspectos de transparencia y control de las transferencias.
A pesar de algunos avances, como
incluir en los mecanismos de control la munición
de todo tipo de armas de fuego -incluyendo las de
caza y tiro deportivo-, buena parte el proyecto
de ley parece limitarse a poner por escrito las
prácticas actuales. Estas prácticas
son las que han permitido en los últimos
años exportaciones de armas muy preocupantes
y las que hasta hoy han hecho imposible saber exactamente
qué cantidad y tipo de armas y otro material
de defensa se vende, presta o regala a un determinado
país.
Transparencia
Según el texto del anteproyecto, el Congreso
conocerá todas las operaciones y países
de destino, así como las denegaciones en
las transferencias de material de defensa y doble
uso. Esto, de hecho, ya ocurre.
Amnistía Internacional,
Greenpeace e Intermón Oxfam insisten en que
la futura ley, para mejorar en cuestiones de transparencia,
debe incluir indicaciones detalladas sobre la información
mínima que debe contener el informe oficial
sobre las estadísticas españolas de
transferencias de material de defensa y doble uso.
En cambio, un aspecto en el que
sí parece producirse un avance importante
en la exigencia de que se informe sobre el uso final
del producto exportado y sobre la naturaleza del
usuario final. De confirmarse este punto, sería
un avance en la dirección correcta.
Control de las transferencias
Según la información proporcionada
por el Gobierno tras el Consejo de Ministros, el
anteproyecto cumple con los criterios del Código
de Conducta de la Unión Europea en materia
de exportación de armas. Sin embargo, el
anteproyecto también se refiere a tener en
cuenta consideraciones desde el punto de vista de
la defensa y la seguridad nacionales y de política
exterior. Amnistía Internacional, Greenpeace
e Intermón Oxfam creemos que el texto final
de la futura ley debe reflejar la aplicación
estricta de los criterios del Código de Conducta
como se pedía en el mandato del Parlamento
al Gobierno en la Proposición No de Ley aprobada
el 13 de diciembre de 2006 para impedir que se venden
armas a países en conflicto, en los que se
violen los derechos humanos o en los que impere
la pobreza.
En el lado positivo, se menciona
como material sujeto a autorización en cualquier
operación todo tipo de armas de fuego y su
munición, incluidas las de caza y tiro deportivo,
lo que de confirmarse, sería un gran avance
y respondería a una de las peticiones más
antiguas de las tres organizaciones. En estos momentos,
España es el principal exportador mundial
de municiones al África Subsahariana, en
operaciones que no están sujetas a autorización
gubernamental porque se catalogan para caza.
Amnistía Internacional,
Greenpeace e Intermón Oxfam lamentan no haber
tenido acceso con antelación al borrador
del anteproyecto antes de su aprobación.
Seguiremos trabajando para mejorar su contenido
durante el trámite parlamentario y lograr
que se garantice un control escrupuloso del comercio
español de armas y la máxima transparencia
para el mismo.
— Amnistía Internacional, Greenpeace e Intermón
Oxfam