Las 'Madres
del Monte', Greenpeace y el MOCASE fueron recibidos
en la Casa Rosada. El gobierno anuncio que intervendrá
en el caso de "Algarrobal Viejo"
Ministro del Interior comprometió
apoyo a la Ley de Bosques
06 febrero 2007 - Buenos Aires,
Argentina — El ministro del Interior, Aníbal
Fernández, comprometió hoy el apoyo
del Gobierno Nacional a la ley de bosques, incluida
dentro del temario de las sesiones extraordinarias
que tratará la Cámara de Diputados
en febrero y anunció la creación de
una mesa de negociación para encontrar una
solución al caso de Algarrobal Viejo, el
pueblo santiagueño amenazado por un desmonte
autorizado por la provincia de Salta.
Fernández, junto con el
Subsecretario de Política Ambiental, Bruno
Carpinetti, recibió hoy en la Casa Rosada
a un grupo de "Madres del Monte" -que
la semana pasada realizaron una protesta frente
a la casa del presidente Néstor Kirchner,
en El Calafate- a la presidenta del Movimiento Campesino
de Santiago del Estero (MOCASE), Nelly Véliz,
y al director Político de Greenpeace, Juan
Carlos Villalonga.
"El ministro expresó
el apoyo del Gobierno Nacional a la Ley de Presupuestos
Mínimos para la Protección de los
Bosques Nativos y aseguró que el Poder Ejecutivo
dialogará con los diputados oficialistas
para compromterlos en la sanción de la ley",
sostuvo Villalonga, al término del encuentro
que se prolongó por casi una hora.
Además, el ministro anunció
la creación de una mesa de diálogo
para encontrar una solución al caso de Algarrobal
Viejo, el pueblo de donde son oriundas dos de las
"Madres del Monte" que participaron de
la reunión, Juana Rosario Arias y Delma Marcelina
Aranda.
Según anunció Fernández,
la mesa estará integrada por funcionarios
del Ministerio del Interior y de la Secretaría
de Medio Ambiente, por el MOCASE, pobladores de
Algarrobal y los gobiernos de Salta y Santiago del
Estero. Además, el ministro aseguró
que existe un compromiso del gobierno de Salta de
"no autorizar" el desmonte del monte límitrofe
con el pueblo hasta que no se encuentre una solución
al conflicto.
Las "Madres del Monte",
que habían acampado la semana pasada frente
a la residencia del presidente Néstor Kirchner
en El Calafate, levantaron su protesta el viernes
pasado luego de que el Gobierno Nacional se comprometiera
a recibirlas en la reunión que se concretó
esta mañana, donde expresaron su desesperación
por el acelerado proceso de destrucción de
los bosques nativos de los que depende la substiencia
de cientos de pequeñas localidades campesinas
del norte argentino.
"La situación que
se vive en Algarrobal Viejo es muy similar a la
que viven muchísimos otros pueblos de nuestro
país. Con los desmontes, los campesinos y
los indígenas, tradicionales ocupantes de
nuestros bosques, son desalojados por las topadoras,
y muchas veces esto sucede con permiso de las provincias.
Es por eso que necesitamos que de manera urgente
se apruebe la Ley de Bosques", señaló
Arias.
La Ley de Presupuestos Mínimos
para la Protección Ambiental del Bosque Nativo
fue aprobada en general por la Cámara de
Diputados en diciembre e incluida en el temario
de las sesiones extraordinarias, para ser tratada
en particular durante las sesiones que tendrán
lugar en febrero.
El proyecto de ley establece una
moratoria a los desmontes por 5 años o hasta
tanto cada provincia desarrolle un ordenamiento
territorial en sus bosques nativos, para que el
territorio sea utilizado de manera racional, compatibilizando
las necesidades sociales, económicas y ambientales.
La norma establece diez criterios
ecológicos y categorías de conservación
que apuntan a planificar las actividades forestales,
agrícolas y ganaderas evitando la fragmentación
y degradación del bosque nativo, y establece
como prioritario cuidar a los bosques que actualmente
ocupan y utilizan comunidades indígenas y
campesinas.
En la Argentina, por año,
se desmontan 250 mil hectáreas de monte nativo,
principalmente en el Chaco Seco, donde se produce
el 70% de la deforestación anual por culpa
de la expansión agrícola (en la mayoría
de los casos soja transgénica) y ganadera.