Es
posible un sistema de generación 100%
renovable, tanto eléctrico y como de
energía total
11 abril 2007 - España
— Greenpeace ha presentado el esperado informe
“Renovables 100%. Un sistema eléctrico
renovable para la España peninsular
y su viabilidad económica”, que demuestra
que es viable plantearse un sistema de generación
basado al 100% en energías renovables,
tanto para cubrir la demanda eléctrica
como la demanda de energía total, a
unos costes totales perfectamente asumibles
y muy favorables respecto a los que podemos
esperar en 2050 si seguimos con el actual
modelo de energías sucias.
Y no hay una única respuesta, sino
muchas formas posibles, con distintas combinaciones
de sistemas de generación eléctrica
basados en fuentes renovables, para satisfacer
la demanda proyectada en 2050.
Para hacerlo realidad, Greenpeace
pide al Gobierno español que establezca
objetivos de obligatorio cumplimiento de planificación
energética de medio y largo plazo,
principalmente que la contribución
de las energías renovables a la generación
de electricidad alcance un 50% en 2020 y un
100% en 2050. Los ecologistas quieren que
estos objetivos se reflejen en la planificación
que el Gobierno está preparando, por
primera vez, para el horizonte 2030.
Con este informe, Greenpeace
aporta un elemento nuevo y fundamental al
debate sobre el cambio climático. Una
vez confirmado por el grupo de expertos de
Naciones Unidas (IPCC) la gravedad de los
impactos del cambio climático (especialmente
negativos para los países del arco
Mediterráneo) provocado por la quema
de combustibles fósiles, la investigación
promovida por la organización ecologista
aporta un rayo de esperanza crucial: es posible
evitar un cambio climático peligroso,
si ponemos en marcha una “revolución
energética” para lograr que las energías
renovables sustituyan a las energías
sucias. La solución es factible, y
Greenpeace lo demuestra analizando un caso
real y concreto como el sistema eléctrico
español. Las barreras no son técnicas
sino fundamentalmente de voluntad política.
“El Gobierno tiene que tomarse
en serio la alarma del cambio climático.
Estamos demostrando que la solución
renovable es factible, así que ya no
hay excusas para no poner en marcha la revolución
renovable que la sociedad está esperando”,
ha declarado José Luis García
Ortega, responsable de la campaña de
energía de Greenpeace.
El informe constituye el
elemento central de la campaña “Revolución
Renovable”, con la que Greenpeace pretende
movilizar a la sociedad como forma de evitar
un cambio climático peligroso. Con
el mensaje Revolución Renovable: el
cambio empieza aquí, la campaña
tiene como objetivo hacer llegar a toda la
sociedad en general, y en particular a los
responsables de tomar decisiones sobre política
energética, la información necesaria
para asumir que un modelo energético
limpio es posible.
Greenpeace considera que
la gran aportación de este estudio
reside en plantearse, por primera vez, la
viabilidad técnica y económica
de los sistemas de generación 100 %
renovables y haber iniciado un camino para
encontrar las respuestas. Aunque son muchos
los análisis a desarrollar para introducir
estos sistemas, lo avanzado con este estudio
es suficiente como para tener claro que es
viable, y ahora corresponde continuar y convertirlo
en realidad a otros organismos y entidades,
como el Ministerio de Industria, IDAE, CIEMAT,
Comisión Nacional de Energía,
Red Eléctrica, compañías
eléctricas, asociaciones empresariales,
universidades...). Lo que ya no hay después
de este estudio son excusas para no seguir
avanzando y de forma muy urgente en esta dirección.
Tras presentar el informe
simultáneamente en Madrid y Barcelona,
Greenpeace tiene previsto darlo a conocer
en distintas ciudades, con presentaciones
específicas para expertos y responsables,
además de actividades de divulgación
para la ciudadanía en general. Los
actos de presentación programados se
anuncian en www.energia.greenpeace.es
El informe ha sido elaborado
para Greenpeace por un equipo de expertos
del Instituto de Investigación Tecnológica
de la Universidad Pontificia Comillas, que
ya elaboró una primera parte (“Renovables
2050”), en la que se demostró que en
el territorio peninsular español disponemos
de fuentes renovables suficientes como para
producir el equivalente a 56 veces la demanda
de electricidad proyectada en 2050. Y sólo
con las tecnologías conocidas hoy en
día y excluyendo todo posible aprovechamiento
en espacios protegidos.
Principales conclusiones
del informe "Renovables 100%"
Las tecnologías de menor coste en el
horizonte 2050 serían las renovables.
Mientras las energías sucias tienden
a ser cada vez más caras, las renovables
irán reduciendo sus costes según
vayan alcanzando su madurez industrial.
Prácticamente todas
ellas podrán generar electricidad a
un coste inferior, en muchos casos muy inferior,
al proyectado para las centrales nucleares
y térmicas de ciclo combinado. La tecnología
de menor coste, en la mayoría de emplazamientos
peninsulares sería la eólica
terrestre.
Las centrales renovables
repartidas por toda la geografía generan
electricidad de modo mucho más regular
en el tiempo que si estuviesen todas en la
misma zona.
Para mantener la generación aún
cuando el recurso disponible (sol, viento,
etc.) disminuya, existen varias soluciones:
tener más potencia instalada; utilizar
la capacidad de almacenamiento y de regulación
de la producción de las centrales de
biomasa, geotérmica y de los embalses
hidráulicos; o emplear centrales termosolares
que puedan utilizar indistintamente la energía
del sol y la biomasa como combustible.
Hay múltiples combinaciones
posibles de sistemas de generación
renovables que permitirían cubrir completamente
a lo largo del año la demanda de electricidad,
e incluso la de energía total.
Cuantas más variedad
de tecnologías renovables utilicemos,
menos centrales tendremos que instalar y mayor
será la seguridad de suministro.
La tecnología termosolar
tiene ventajas únicas: su potencial
es el mayor, se puede poner en marcha cuando
más energía se necesita, permite
acumular energía durante el día,
disponemos del recurso y de la tecnología,
podemos ser líderes mundiales y puede
ser una tecnología clave para el desarrollo
sostenible en muchas regiones del mundo.
El uso más apropiado de la biomasa
sería como energía de respaldo
en centrales termosolares, de forma que estas
centrales podrían estar disponibles
para generar en todo momento. Esto proporciona
una gran seguridad de suministro y reduce
el coste del sistema de generación.
Se necesita muy poca capacidad
de acumulación de energía, o
incluso ninguna, para gestionar adecuadamente
un sistema eléctrico 100% renovable.
Los sistemas que permitan cubrir toda la demanda
eléctrica con renovables al menor coste
de ciclo de vida utilizan una considerable
variedad de tecnologías, sin que ninguna
de ellas resulte dominante.
Hemos demostrado que se
pueden desarrollar herramientas para diseñar
mix de generación eléctrica
basados en renovables con costes asociados
muy favorables, más económicos
incluso que los actuales.
Para cubrir los escasos
momentos en que la demanda sea mayor que la
capacidad de generación de un sistema
100% renovable económicamente óptimo,
la herramienta más económica
y apropiada sería la gestión
de la demanda, en vez de instalar más
centrales.
Para alcanzar un mix renovable
económicamente óptimo, es necesaria
una adecuada planificación.
La red de transporte eléctrico
no tiene por qué ser una barrera para
gestionar un sistema eléctrico 100%
renovable. La red es un medio y no un fin,
y debería adaptarse a los requerimientos
de un sistema renovable.
Un sistema eléctrico
100% renovable dispondría de gran cantidad
de energía sobrante (cuando produce
más de lo que se necesita), que si
se aprovechase para otros usos energéticos
no eléctricos (transporte, edificios...)
se lograrían grandes ahorros de energía
y se reduciría el coste total.
Para que las renovables
pasen a ser los elementos principales del
sistema de generación de electricidad,
tendrán que utilizarse de modo diferente
al actual (en que funcionan siempre que hay
sol o viento), de forma que su funcionamiento
se adapte a las necesidades de la demanda.
También cambiaría la forma de
utilizar la gestión de la demanda.
Aunque el informe analiza
el sistema eléctrico peninsular español
en su conjunto, para su elaboración
se han tenido en cuenta datos de recursos
renovables y de costes de ámbito provincial.
El análisis de costes para cada tecnología
presenta resultados para cada comunidad autónoma.