01
agosto 2007 - Estado de México, México
— A dos meses y medio del asesinato de Aldo
Zamora Baldomero, la Procuraduría de
Justicia del Estado de México (PGJEM)
informó que dos de los homicidas, Fernando
y Silvestre Jacinto Medina, fueron detenidos
este día en las inmediaciones del municipio
mexiquense de Ocuilan.
Ante este hecho, las organizaciones
Centro de Derechos Humanos Agustín
Pro Juárez y Greenpeace México
llamaron a las autoridades locales a garantizar
la integridad física de la familia
Zamora Baldomero, pues con estas detenciones
se incrementa el nivel de riesgo y la probabilidad
de represalias y de hostilidad hacia los comuneros
de San Juan Atzingo, en particular hacia Ildefonso
y Misael Zamora.
La detención de Fernando
y Silvestre Jacinto Medina es un paso muy
importante para la procuración de justicia,
pero no es el final ya que dos de los asesinos
todavía están en libertad, los
señores Luis y Alejo Encarnación,
y falta que los detenidos sean procesados
conforme a derecho, señalaron las organizaciones.
Más aún, para
que haya plena justicia en el caso de San
Juan Atzingo, es necesario que se proceda
a castigar a otros 57 talamontes que operan
en la zona y que hasta ahora han ocasionado
la deforestación total de 300 hectáreas
de bosques dentro del Parque Nacional Lagunas
de Zempoala y han afectando otras 3 mil hectáreas
en total. Mientras no se detenga a los integrantes
de estas bandas, de las cuales los asesinos
de Aldo forman parte, no se habrá hecho
justicia para la familia Zamora, ni para los
bosques de San Juan Atzingo.
El asesinato de Aldo Zamora,
cometido el pasado 15 de mayo, fue una clara
represalia contra su padre, Ildefonso Zamora
Gómez, ya que desde 1998 ha denunciado
la tala ilegal en los bosques de su comunidad,
San Juan Atzingo, Ocuilan, Estado de México.
Los bosques de San Juan
Atzingo forman parte del PNLZ y se encuentran
dentro del Gran Bosque de Agua, el cual alberga
dos por ciento de la biodiversidad mundial,
abastece tres cuartas partes del agua que
se consume en la Ciudad de México,
dota de agua a los ríos Lerma y Balsas,
ayuda a mitigar el Cambio Climático
y sus impactos en la región. Sin embargo,
la región de las Lagunas de Zempoala-
Hutzilac es considerada como una de las 15
zonas críticas de tala ilegal en México,
las cuales en conjunto albergan el 60 por
ciento de esta actividad en nuestro país.