Buenos Aires,
Argentina — Luego de cuatro años con
alto de riesgo de desmonte, y de intensa campaña
contra su destrucción, la Selva Pedemontana
de Yungas de la finca Sauzalito-Yuto acaba
de ser salvada.
El jueves pasado la empresa
Ledesma se comprometió a preservar
la zona al comprender que la misma es un área
prioritaria de conservación por su
importancia biológica.
El compromiso de la empresa
quedó plasmado en un Acuerdo firmado
por la empresa, Parques Nacionales, Gobierno
de la Provincia de Jujuy, Greenpeace y Fundación
Vida Silvestre. Por el mismo Acuerdo la provincia
de Jujuy se comprometió a realizar
en un plazo de 30 días una convocatoria
para recibir recomendaciones en torno a su
propuesta de Ordenamiento Territorial de los
bosques de esa provincia.
Este es un logro importantísimo
y una victoria de nuestros bosques y nuestro
patrimonio natural. No solo se acaba de salvar
una zona de gran importancia biológica
sino que nuestra campaña nacional por
la promulgación de una Ley de Bosques
que establezca un claro y consensuado ordenamiento
territorial, comienza a tomar forma en la
provincia de Jujuy.
Nuestra campaña para
la preservación de Sauzalito-Yuto comenzó
cuando, en diciembre de 2002, el ingenio azucarero
Ledesma SAAI ingresó al gobierno jujeño
un pedido de desmonte para incrementar la
superficie de su plantación de caña
de azúcar en 1.400 hectáreas
en dicha zona.
El sitio representa la porción
más baja de selvas pedemontanas planas,
considerado el ecosistema actualmente en mayor
riesgo de la Argentina. Además de ser
hogar de muchas especies animales y vegetales
amenazadas, la importancia de Sauzalito reside
en que representa un corredor natural entre
la yunga y el chaco, lo que permite la migración
de especies y regulación de ambos ecosistemas.
En Abril del 2003, Greenpeace
junto a la filial jujeña de la Asociación
de Trabajadores del Estado (ATE), la Central
de los Trabajadores Argentinos (CTA) y la
Corriente Clasista y Combativa (CCC) reclamó
al gobernador Eduardo Fellner a que detenga
los proyectos de desmonte de las empresas
Ledesma y La Mendieta, ya que pondrían
al borde de la extinción a la selva
pedemontana de las Yungas, en el norte del
país. En este marco se organizó
una marcha de la que participaron más
de 4000 personas.
El 15 de mayo del mismo
año, tres activistas de Greenpeace
fueron arrestados por protestar contra proyecto
de desmonte al desplegar un cartel que decía
"No autoricen desmonte a Ledesma".
Días más tarde,
Greenpeace advirtió que en las próximas
horas el gobierno jujeño autorizaría
a la empresa Ledesma a desmontar 1400 hectáreas
en una zona crítica de la selva pedemontana
de las Yungas. Para impedirlo se solicitó
una audiencia urgente al gobernador Eduardo
Fellner, con el propósito de demandarle
que considere las propuestas alternativas
presentadas por organizaciones sociales y
ambientales
Al no obtener una respuesta
positiva, el 29 de mayo Greenpeace lanzó
una campaña para que consumidores de
azúcar, papel y cuadernos Ledesma pidan
a la firma que pare el desmonte. Además
activistas de Greenpeace disfrazados de animales
de las Yungas, denunciaron los planes de la
empresa azucarera Ledesma en un supermercado
de Palermo.
A fines del mes de junio
y luego de una campaña que incluyó
coloridas protestas y miles de mensajes del
público, el gobierno jujeño
encabezado por Eduardo Fellner llamó
a las partes a una mesa de concertación
para encontrar una solución al conflicto.
En octubre de 2003, la Comisión
de Recursos Naturales de la Cámara
de Diputados de la Nación logró
la aprobación en el recinto de un llamado
urgente contra la destrucción de la
selva Pedemontana de las Yungas. Esta declaración
hacía referencia directa al desmonte
solicitado por Ledesma.
Finalmente en el año
2004 la empresa Ledesma SAAI suspendió
el proyectado desmonte de mil cuatrocientas
hectáreas de bosques situados en el
área Sauzalito, reconociendo al área
su vital importancia para garantizar la conectividad
del corredor regional de Yungas andinas. En
ese momento Greenpeace le pidió a Ledesma
que realizara también un Ordenamiento
Territorial predial.
En mayo de 2.006 la empresa
Ledesma realiza el Ordenamiento Territorial
de sus predios e impulsa el ordenamiento de
la Provincia, pero incluye como zona a desmontar
a la finca Sauzalito-Yuto.
A comienzos del 2007 la
provincia de Jujuy decidió por Resolución
del Ministerio de Producción el Ordenamiento
Territorial de la Provincia. Frente a esta
decisión, Greenpeace pidió a
Jujuy que incluya la instancia de participación
para legitimar dicho Ordenamiento y resalta
las 50.000 hectáreas de Yungas a desmontar.
Días más tarde,
Greenpeace se reunió con el Ministro
de Producción de Jujuy y deciden organizar
una reunión para resolver dos temas
puntuales: el conflictivo proyecto de desmonte
de Sauzalito-Yuto y el Ordenamiento Territorial
de la provincia.
El 26 de julio se lleva
a cabo la reunión en la que se resuelve
lo escrito en el acta adjunta dando lugar
a la salvación de Sauzalito-Yuto y
a que Jujuy se encamine a ser la primera provincia
del país en realizar el Ordenamiento
Territorial de sus bosques nativos.