WWF/Adena
pide al Ministerio de Defensa mayor efectividad
en la prevención de incendios y la
aplicación de la ley a los incendiarios
Madrid, Para evitar que
se repitan incendios forestales como los que
han asolado el territorio nacional este fin
de semana, WWF/Adena hace un llamamiento al
poder judicial para que aplique el Código
Penal y para que el Ministerio de Defensa
redacte, revise y cumpla los planes de prevención
de incendios en los terrenos de su competencia.
Los dramáticos incendios
que han afectado al país en el último
fin de semana ponen de manifiesto, una vez
más, la necesidad de desarrollar y
aplicar políticas efectivas para evitar
que se inicien incendios forestales y para
reducir su impacto.
En la reciente presentación
de su Incendiómetro 2007 (www.wwf.es),
WWF/Adena llamaba la atención sobre
el elevadísimo número de incendios
forestales causados por el hombre, que ascienden
a la cifra de 20.220 y que suponen más
de un 96% de los incendios acontecidos en
España en el periodo 1991-2005. El
incendio ocurrido en la Reserva de la Biosfera
de Gran Canaria, que ya ha arrasado más
de 3.500 hectáreas de los pinares más
valiosos de la isla, es un ejemplo más
de la importancia del factor humano en el
origen de los incendios.
WWF/Adena considera que
la única manera de revertir esta situación
es la aplicación efectiva de condenas
y su cumplimiento íntegro. A nivel
nacional tan sólo se identifica al
2% de los causantes de los incendios y se
detiene a menos del 1%.
En palabras de Enrique Segovia,
Director de Conservación de WWF/Adena,
“los incendios en España tienen nombre
y apellidos. Para que los incendiarios dejen
de actuar con la impunidad que lo hacen, es
necesario el cumplimiento de sanciones ejemplares
por parte de los culpables que tengan un efecto
disuasorio para el resto de la sociedad”.
WWF/Adena recuerda, además,
la necesidad de coordinación entre
las distintas administraciones implicadas,
tanto en la prevención como en la extinción
de incendios. Todos los años se producen
en nuestro país incendios debidos a
negligencias en terrenos militares. Concretamente,
desde 1996 ha ardido por este motivo el 1%
de la superficie forestal. En el último
de estos siniestros, acaecido en el campo
de tiro de la base militar del Cerro Muriano
en Córdoba, se han quemado también
más de 3.500 ha de monte mediterráneo.
Las causas de este incendio y el desarrollo
de las labores de extinción demuestran
la necesidad de que el Ministerio de Defensa
elabore, revise y aplique los planes de prevención
de incendios forestales en los terrenos de
su competencia, planes que la ley les exige.
La Comisión Interministerial
de Lucha Contra Incendios Forestales, creada
en el año 2005, es la encargada de
coordinar las medidas adoptadas por las distintas
administraciones en materia de prevención
y lucha contra los incendios forestales. Según
Enrique Segovia, “la Comisión debería
garantizar que todos los Ministerios, incluido
Defensa, desarrollen medidas efectivas para
que en lo sucesivo no tengamos que lamentar
la pérdida de superficie forestal de
elevado valor ambiental”.
Artículo: Lourdes Hernández
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WWF/Adena considera necesarias
las ayudas a Canarias pero insiste en que
se invierta más en el monte
Madrid, 3 de agosto de 2007.-
WWF/Adena considera que las ayudas a Canarias
constituyen un importante apoyo que sin duda
contribuirá a paliar algunos de los
daños materiales ocasionados por las
llamas, pero recuerda que en la lucha contra
el fuego es necesario poner énfasis
en la prevención, incrementando las
inversiones en gestión forestal sostenible.
En la actualidad, las Comunidades
Autónomas tan sólo destinan
una media del 3% de sus presupuestos a gestión
forestal -incluyendo el dispositivo de extinción-
y la inversión equivalente por hectárea
de superficie forestal no alcanza los 30 euros.
Viendo cómo verano tras verano arden
nuestros bosques, no hay más remedio
que reconocer que estas cifras resultan claramente
insuficientes para acabar con el avance del
fuego.
En su reciente estudio sobre
incendios (Incendiómetro 2007, disponible
en www.wwf.es), WWF/Adena llamaba la atención
sobre el elevado coste económico que
suponen los incendios forestales. Desde el
punto de vista del gasto en extinción,
cada hectárea quemada cuesta 3.000
euros. De forma que, durante los 6 días
que el fuego ha afectado a una superficie
de 31.500 hectáreas en las islas Canarias,
sólo el dispositivo de extinción
ha supuesto un coste de 94,5 millones de euros.
Sin embargo, el daño
de los incendios forestales genera pérdidas
totales muy superiores a estas. WWF/Adena
ha realizado una estimación de la pérdida
económica anual debido a los incendios
forestales en España considerando no
sólo la renta, sino el valor recreativo
y ambiental del monte. Así, la organización
de conservación ha estimado los daños
en 1.800 millones de euros anuales. La necesidad
de que se valoren e incluyan como daños
económicos ocasionados por los incendios
todas las pérdidas de los bienes y
servicios del monte ha sido reconocida recientemente
por el Fiscal Especial de Medio Ambiente,
al declarar que el valor de los acuíferos
debe incluirse entre los daños que
ocasionan estas catástrofes.
Según Félix
Romero, responsable de Bosques de WWF/Adena,
“estas cifras evidencian que la gestión
forestal sostenible es la herramienta más
beneficiosa en términos coste/beneficio,
tanto ambientalmente como económicamente.
Si queremos terminar con el drama ambiental
y social y el enorme coste económico
que cada verano suponen los incendios en nuestro
país, necesitamos invertir recursos
en planes de gestión forestal que favorezcan
la puesta en valor de los productos y servicios
del monte, con herramientas como la certificación
FSC.”
Además, concluye
Romero:“a pesar de que las competencias en
materia forestal son de las Comunidades Autónomas,
el Gobierno central debe ejercer una mayor
labor de coordinación y exigir una
inversión mínima que garantice
la gestión forestal sostenible del
monte, tal y como demanda la Ley de Montes”.
Artículo: Elena Domínguez
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LOS MÁS JÓVENES
AYUDARÁN A CONSERVAR MONTEJO DE LA
VEGA CON APOYO DE OBRA SOCIAL CAJA MADRID
Montejo de la Vega (Segovia),
2 de agosto de 2007.- Agosto arranca en el
Refugio de Rapaces de Montejo de la Vega (Segovia)
con una semana, del 6 al 10, plagada de actividades
enmarcadas en la “Semana de Participación
Local”. Organizada por WWF/Adena para los
más jóvenes, su objetivo es
lograr que los participantes colaboren en
la conservación de este espacio y conozcan
muy de cerca su patrimonio natural.
Durante la primera semana
de agosto, y gracias al patrocinio de Obra
Social Caja Madrid, WWF/Adena ha organizado
una edición más, la cuarta,
de la “Semana de Participación Local”
en el Refugio de Rapaces de Montejo de la
Vega (Segovia). Dirigida a jóvenes
de la zona a partir de 12 años, incluye
un completo programa de actividades de conservación
y de seguimiento científico, combinadas
con otras de aspecto más lúdico.
El propósito de todas estas actuaciones
es fomentar la participación en la
conservación del espacio.
Así, del 6 al 10
de agosto doce participantes tendrán
la oportunidad de colaborar en diferentes
acciones de conservación, como la limpieza
de riberas, el mantenimiento de plantaciones
o la instalación de bebederos para
perdiz, entre otras. De igual forma, los participantes
cooperarán en actuaciones de seguimiento
científico, como el avistamiento nocturno
de fauna y el anillamiento de aves. Todo ello,
sin olvidar que una de las actividades más
llamativas de este año consiste en
invitar a los jóvenes a presenciar
en vivo y en directo un festín de los
buitres (carroñada) en el comedero
de Montejo de la Vega.
Un año más,
tal y como ha ocurrido en pasadas ediciones,
se espera que haya muy buena respuesta. No
en vano, todas las plazas ofertadas ya han
sido cubiertas. Además, los organizadores
se han preocupado de incorporar en esta ocasión
en el programa las sugerencias de quienes
asistieron en 2006.
Según María
Melero, Técnico del Refugio de Montejo
de la Vega, “Esta es una manera amena y divertida
para que los chavales conozcan un poco más
de cerca las actividades que normalmente WWF/Adena
desarrolla en el Refugio y colaboren y se
involucren en la conservación de su
patrimonio natural”.
El Refugio de Rapaces de
Montejo de la Vega (Segovia) es uno de los
proyectos más emblemáticos de
WWF/Adena. Este Refugio se ha convertido,
debido a las eficaces medidas de conservación
desarrolladas durante tres décadas
de trabajo ininterrumpido, en uno de los santuarios
para las rapaces ibéricas y especialmente
para el buitre leonado.
Artículo: María Melero
