03 septiembre 2007 - Orán,
Salta, Argentina — Vecinos de la comunidad
de Orán y Greenpeace bloquearon hoy
el acceso a una de las fincas ubicadas dentro
de la zona declarada Reserva de Biósfera
por la UNESCO, en Salta, e impidieron la circulación
de un camión que transportaba caña
de azúcar proveniente del desmonte
de más de mil hectáreas de selva
de yungas, autorizado por el gobierno salteño.
Unas 50 personas, entre
los que se contaban vecinos de Orán
y activistas de Greenpeace, realizaron esta
mañana una sentada frente a la entrada
principal de la finca Abra Grande y Abra Chica,
ubicada sobre la ruta provincial 18, que abarca
parte de la zona protegida por la UNESCO y
cuyo desmonte es inminente, ya que el gobierno
provincial autorizó a la firma Los
Dos Ríos S.A. a desmontar 1.670 hectáreas
de selva.
Greenpeace señaló
que este desmonte se enmarca en una descontrolada
emisión de permisos de eliminación
de bosques nativos por parte de Salta, ya
que, tan sólo en los últimos
siete meses, la provincia convocó a
audiencias públicas para autorizar
desmontes por un total de 200.000 hectáreas,
lo que equivale a 10 veces la superficie de
la ciudad de Buenos Aires.
"Esta es la primera
acción directa que realizamos en la
zona para impedir el desmonte de la Reserva
de Biósfera, porque mientras el gobierno
provincial siga siendo cómplice del
remate de los bosques nativos, no nos queda
otra herramienta que la intervención
en el terreno para frenar el avance de las
topadoras", sostuvo Noemí Cruz,
coordinadora de la campaña de Bosques
de Greenpeace.
"La autorización
de este desmonte dentro de los límites
de la Reserva Mundial de la Biósfera
implica el incumplimiento por parte de nuestro
país de acuerdos internacionales, y
una grave amenaza para la rica biodiversidad
existente en la región. Por eso resulta
imprescindible que el Senado de la Nación
deje de demorar y apruebe de manera urgente
la Ley de Bosques", agregó Cruz.
La norma, que ya cuenta
con media sanción de Diputados, establece
la moratoria a los desmontes hasta tanto las
provincias realicen un ordenamiento territorial
de los bosques nativos para planificar de
manera participativa su uso sustentable, y
prohíbe explícitamente el otorgamiento
de permisos de desmonte en zonas tradicionalmente
habitadas.
"Como los senadores
se niegan a votar la Ley de Bosques, llamamos
a todos los argentinos a sumarse a nuestra
campaña. Buscamos sumar 1 millón
de votos para demostrarles que somos muchos
los argentinos que queremos salvar a nuestros
últimos bosques nativos", sostuvo
Cruz.
Las adhesiones, que ya superan
las 400 mil, se recolectará en nuestra
página web haciendo click aquí.
La posible autorización
del desmonte dentro de la reserva había
generado una encendida defensa a favor de
la biodiversidad de la región por parte
de la comunidad de Orán durante una
audiencia pública realizada en esa
ciudad del norte de Salta.
Los últimos datos
de Secretaría de Ambiente y Desarrollo
Sustentable de la Nación revelan que
nuestro país se encuentra en una verdadera
Emergencia Forestal: entre 1998 y 2002 desaparecieron
781.930 hectáreas pero en los últimos
cuatro años, el proceso se acentuó
y los desmontes arrasaron con 1.108.669 hectáreas,
lo que equivale a 280.000 hectáreas
por año, 821 hectáreas de bosques
por día, es decir, 34 hectáreas
por hora.
La mayor aceleración
a los desmontes se registra en la provincia
de Salta, donde la desaparición de
masa boscosa durante estos últimos
cuatro años alcanzó las 414.934