01 septiembre 2007 - Chile
— Debido al rechazo que la Comisión
Nacional de Uso del Borde Costero hizo sobre
la propuesta de la declaratoria de un área
marina protegido al sur de Chiloé,
Greenpeace exige que esta sea revisada por
todos los actores involucrados.
Santiago, 31 de agosto de 2007. Greenpeace
en el marco del foro patagónico, herramienta
de entendimiento de las ONG que trabajan para
la conservación marina, apoyó
el documento desprendido de este foro en el
cual se condiciona el apoyo a la declaratoria
del Área Marina Protegida del Golfo
del Corcovado por parte del gobierno.
El documento ( puedes revisarlo
en Informes Relacionados en nuestro sitio)
reúne las preocupaciones y condiciones
para que estas organizaciones ambientales
den su apoyo a la declaratoria, fue entregado
a la Subsecretaría de Marina con el
objetivo de que ésta expresara en su
presentación ante la Comisión
Nacional de Uso del Borde Costero los comentarios
provenientes de Greenpeace y las otras ONG.
El documento que incorpora
sólo los comentarios de las organizaciones
ambientales, ha sido criticado por no incorporar
la opinión de los otros actores como
pescadores y mapuches. Sin embargo, aunque
éste no incorpora todas las preocupaciones,
los cuestionamientos de las ONG no son excluyentes
con las demandas de estos actores ni está
en oposición de lo que ellos quieren,
“Greenpeace considera que
hay varios puntos de vista que revisar para
avanzar con una declaratoria que satisfaga
a todos, y por eso exige a la autoridad nacional
que asuma el liderazgo que le corresponda
creando una mesa multisectorial que involucre
a todos y se generen y recopilen todos los
comentarios y preocupaciones que deben ser
contemplados en esta discusión.
A nuestro juicio , que los
pescadores artesanales y algunas ONG señalen
que hay un serio problema de transparencia
y poca información es inaceptable,
por lo tanto, elgobierno debe asegurar que
esta situación no permanezca en esas
condiciones confusas”, señalo Samuel
Leiva, Coordinador de Campaña de Greenpeace
Chile.
“Greenpeace considera que
la creación de la Area Marina Protegida
(AMP) para la conservación de las ballenas
azules que visitan la zona es necesaria, pero
ésta debe contar con la aprobación
y entendimiento de todos los actores”, puntualizo
Leiva.
Sin duda, para Greenpeace
hay ciertos impactos negativos a los ecosistemas
que deben ser revisados y considerados, los
que principalmente tienen que ver con el avance
de las posibles actividades productivas e
industriales, tales como el tránsito
marino por el área y la industria salmonera,
y el incremento del número de jaulas.
Sobre las posibles impactos
que se pudiesen producir en las actuales condiciones
que están operando los pescadores artesanales,
para el coordinador de campaña de Greenpeace,
éstas deben ser consideradas dependiendo
de sus impactos, y siempre se debe tomar en
cuenta que toda actividad debe ser regulada
para el buen uso de todos los interesados,
esto le da garantías a todos, especialmente
a los pescadores artesanales. De esa manera
se evita que sean estos últimos los
que tengan que cambiar su labor a otras que
no han sido parte de su desarrollo tradicional.