13
junio 2008 - DF, México — En la próxima
reunión anual de la Comisión
Ballenera Internacional (CBI), que se llevará
a cabo en Santiago de Chile la última
semana de junio, México apoyará
la creación de un Santuario Ballenero
del Atlántico Sur, que abarcaría
toda la región austral de este océano
a partir del Ecuador
Del 23 al 27 de Junio, representantes de 80
países, incluyendo México se
reunirán en Santiago de Chile para
decidir el futuro de las ballenas en el marco
de la reunión anual de la Comisión
Ballenera Internacional (CBI).
Como todos los años,
Japón justificará su cacería
bajo la bandera “científica".
Es por eso que se auto impone cuotas de matanza
de casi mil ballenas al año, incluyendo
ballenas de aleta y jorobadas, ambas poblaciones
en riesgo.
Esta última temporada,
Japón cazó 551 ballenas de las
935 ballenas minke que tenía pensado
cazar. A pesar de que los seis barcos de la
flota ballenera pasaron tres meses buscando
su cuota de 50 ballenas de aleta, no encontraron
ninguna.
También decidieron
cancelar su cuota de 50 ballenas jorobadas
al año debido a las protestas que se
manifestaron alrededor de todo el mundo. Sin
embargo, pese a eso, ese número es
muy alto, ya que en total desde que se estableció
la moratoria a la caza comercial en 1986,
Japón ha cazado más de 20 mil
cetáceos.
La caza japonesa de ballenas
ya concluyó esta temporada, sin embargo
el próximo paso para Greenpeace será
presionar a los países en el marco
de la Comisión Ballenera Internacional
en Junio.
En esta reunión,
países a favor de la conservación
de ballenas como México, apoyarán
la creación de un Santuario Ballenero
del Atlántico Sur, que abarcaría
toda la región austral de este océano
a partir del Ecuador.
Con esta designación se dará
un paso muy importante en este tema de la
conservación de ballenas, ya que 54
especies de cetáceos estarían
protegidas.
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Activistas de Greenpeace
devuelven basura electrónica a oficinas
de Philips
10 junio 2008 - Internacional
— Greenpeace exige a la compañía
holandesa que implemente un plan de recolección
a nivel mundial y que asuma, junto con todos
los productores electrónicos, la total
responsabilidad de la basura que generan sus
productos.
Activistas de Greenpeace devolvieron hoy basura
electrónica a las oficinas centrales
de Philips para señalar el rechazo
de la compañía a hacerse responsable
del destino de sus productos en desuso. Con
protestas en Holanda, Dinamarca, India y Rusia,
Greenpeace exigió al gigante electrónico
holandés que implemente un plan de
recolección a nivel mundial.
Actualmente, la mayoría
de estos residuos termina en la basura doméstica
o es exportada, a menudo ilegalmente, para
el vertido o la recolección rudimentaria
en países en vías de desarrollo.
“Si Philips continúa
negándose a asumir su responsabilidad,
generará como resultado grandes cantidades
de basura electrónica peligrosa distribuida
alrededor del mundo. Se expondrá a
la gente y al ambiente que rodea los vertederos
de basura, o al llamado sector de reciclado
informal, a un cóctel de químicos
tóxicos”, explicó Martin Besieux,
coordinador de la campaña de Tóxicos
de Greenpeace Internacional.
Como primer paso, Philips
debe implementar sistemas eficientes de recolección
en todos los países donde sus productos
son vendidos, y en particular en Rusia, India,
Argentina y Tailandia. Estos países
están debatiendo actualmente una futura
legislación de basura electrónica,
por eso es el momento ideal para que Philips
tome la delantera apoyando, a través
de sus acciones así como de sus políticas,
el principio de responsabilidad individual
del productor.
Philips está haciendo
lobby en contra de la legislación que
obligará a que las compañías
sean responsables directas de los costos de
reciclado de sus productos. Como resultado,
el status quo del diseño tóxico
de productos, que obstaculiza el reciclado,
se mantiene.
“Compañías
como Sony, Samsung y Nokia han llevado a cabo
proyectos de sistemas voluntarios de recolección
incluso en países donde no son requeridos
legalmente. Philips debe tener un programa
completo, constante y mundial de cuidado de
la basura electrónica generada por
sus productos obsoletos, y dejar de ser un
rezagado ambiental para convertirse en un
líder ambiental”, señaló
Besieux.
Servicios voluntarios de
recolección alentarán a los
productores a que en la etapa del diseño
de sus productos dejen de usar sustancias
tóxicas, permitiendo así un
reciclado más seguro y una reducción
de los costos de productos en desuso para
las compañías. Greenpeace exige
que todos los productores electrónicos
asuman la total responsabilidad de la basura
que generan sus productos a nivel global,
asegurándose de que sean desechados
y reciclados correctamente.
+ Más
Activistas de Greenpeace
fueron atacados por la Policía Militar
Checa en Peaceland
12 junio 2008 - Peaceland,
Brdy, República checa — El Nuevo estado
de Peaceland (Tierra de Paz), creado por activistas
de Greenpeace en oposición a la instalación
de un Radar antimisiles en la región
checa de Brdy, fue atacado ayer por la Policía
Militar Checa. Todos los activistas fueron
arrestados.
Diez vehículos repletos
de policías militares llegaron ayer
por la tarde a las inmediaciones de Peaceland,
rodearon el lugar y arrestaron a los ciudadanos,
que se resistieron pacíficamente y
subieron por sí mismos a los autos
policiales.
Los oficiales también
confiscaron una cámara con la que uno
de los activistas estaba filmando el ataque.
La acción policial fue planeada y aunque
los activistas de Greenpeace tenían
información sobre un posible ataque,
no abandonaron el lugar.
“Protestamos contra la intervención
de la Policía Militar Checa. Ellos
no tienen autoridad para arrestarnos en las
inmediaciones de Peaceland. El Primer Ministro
Checo, Mirek Topolánek, quien fue oficialmente
informado del establecimiento del nuevo estado
e invitado a Peaceland, admitió que
sabía del ataque antes de que ocurriera.
Tiene que estar loco para pensar que este
ataque es una visita amistosa”, expresó
Jan Freidinger, coordinador del proyecto Radar
de Greenpeace República Checa.
Activistas de la Republica
Checa, Eslovaquia, Alemania, Austria, Bélgica
y Estados Unidos, establecieron la semana
pasada un estado independiente en la región
checa de Brdy, como protesta a la instalación
de un radar antimisiles estadounidense en
la zona.
“Estamos convencidos de
que el proyecto de Defensa Nacional de Misiles
(NMD), que incluye la ubicación de
uno de sus componentes en el territorio checo,
trae consigo serios riesgos como el desequilibrio
mundial, el aumento de la tensión internacional
y el comienzo de una nueva carrera armamentística.
No creemos que este proyecto sea la herramienta
apropiada para resolver los serios problemas
que nos urgen”, señaló Jirí
Tutter, Director Ejecutivo de Greenpeace República
Checa y ciudadano de Peaceland.