19 de Septiembre de 2008
- El director ejecutivo
del Programa de Naciones Unidas para el Medio
Ambiente (PNUMA) Achim Steiner hará
una visita oficial a Panamá con la
finalidad de conocer el estado de la gestión
ambiental del país y tomar contacto
con las instituciones, organismos no gubernamentales
y entes que promueven el desarrollo sustentable
panameño.
Esta visita está
programada del 19 al 20 de septiembre y será
aprovechada por el director ejecutivo del
PNUMA para conocer las nuevas instalaciones
de la oficina regional para América
Latina y el Caribe de esta agencia, así
como del resto del Sistema de Naciones Unidas
en Panamá.
Achim Steiner fue designado
por el entonces Secretario General de las
Naciones Unidas Kofi Annan en 2006 para desempeñarse
en el cargo de director ejecutivo del PNUMA
por un periodo de cuatro años. El PNUMA
es una organización ampliamente reconocida
como una de las organizaciones más
influyentes y respetadas en el campo de la
conservación, el medio ambiente y la
gestión de los recursos naturales.
Durante su visita al país, el director
ejecutivo del PNUMA sostendrá entrevistas
con el ministro de Relaciones Exteriores,
la ministra en Asuntos Relacionados con el
Ambiente, Ligia Castro de Doens y se reunirá
con funcionarios de la Autoridad Nacional
del Ambiente (ANAM), la Ciudad del Saber y
la Autoridad del Canal de Panamá (ACP);
además con representantes de la sociedad
civil para dialogar sobre la gobernabilidad
ambiental en el país.
El director ejecutivo Steiner
tiene una amplia trayectoria profesional,
vinculada a la promoción de políticas
de desarrollo sustentable y la gestión
del medio ambiente. Tiene un conocimiento
sobre la sociedad civil, el gobierno y las
organizaciones internacionales así
como experiencia mundial en los cinco continentes
que lo convierten en un experto de carácter
mundial en estos asuntos.
Su carrera profesional incluye
posiciones como asesor principal de políticas
en la Unión Mundial por la Naturaleza
(UICN); además encabezó el desarrollo
de nuevas sociedades en el Banco Mundial y
Naciones Unidas. También fue asesor
principal del programa para la gestión
sustentable del río Mekong en China
y desarrolló tareas de unión
del sector público, la sociedad civil
y la empresa privada en Sudáfrica.
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Mensaje del Secretario General
en ocasión del Día Internacional
de la Preservación de la Capa de Ozono
16 de Septiembre de 2008
- La perturbación de los mercados,
el descenso de la actividad económica
y los rumores de recesión siempre han
presagiado tiempos duros para el medio ambiente.
En circunstancias de esa índole, muchas
veces la salvaguardia del planeta se ha considerado
un lujo y una carga para la recuperación
económica y el desarrollo. Sin embargo,
la singular historia de la capa de ozono,
cuya preservación celebramos hoy, demuestra
que tales ideas no son más que mitos.
Una acción multilateral
decidida ante las amenazas y los desafíos
que afronta el medio ambiente puede redundar
en beneficios sanitarios, sociales y económicos
de gran envergadura. El Protocolo de Montreal
relativo a las sustancias que agotan la capa
de ozono, eje de nuestros esfuerzos para combatir
el agotamiento del frágil escudo protector
de la Tierra, contribuye también a
luchar contra el cambio climático,
pues se ha determinado que muchas de las sustancias
químicas controladas con arreglo a
este tratado también contribuyen al
calentamiento del planeta. Con la reducción
progresiva de los clorofluorocarbonos (CFC)
—que otrora se utilizaban comúnmente
en productos como los refrigeradores— y la
decisión ya adoptada de acelerar la
reducción progresiva de los hidrofluorocarbonos,
el tratado ha ofrecido un beneficio doble.
Espero que los gobiernos tengan presentes
esos resultados y se sientan en condiciones
de hacer frente a una amplia gama de problemas
ambientales, y no sólo en épocas
de prosperidad. Las medidas que adopten en
ese contexto deberían incluir un estudio
más completo de las sinergias naturales
que pueden existir entre nuestros diversos
acuerdos multilaterales sobre el medio ambiente.
El año próximo
los gobiernos celebrarán en Copenhague
una conferencia crucial relativa a la Convención
Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio
Climático. Nuestra meta debe ser la
adopción de un nuevo acuerdo decisivo,
que coloque al mundo en el rumbo correcto
para estabilizar las concentraciones de gases
de efecto invernadero en la atmósfera
y ofrezca la financiación necesaria
para que los países vulnerables puedan
adaptarse a los efectos del cambio climático.
Este acuerdo no sólo constituiría
un avance en el enfrentamiento a uno de los
mayores desafíos de nuestro tiempo,
sino que también podría contribuir
a poner freno a la contaminación del
aire de las zonas urbanas, la deforestación,
la pérdida de diversidad biológica,
y otros peligros.
Tras decenios de agresiones
químicas, tal vez la capa de ozono
necesite otros 50 años para recuperarse
totalmente. El Protocolo de Montreal nos ha
enseñado que cuando degradamos demasiado
nuestro medio ambiente, su recuperación
no se logra de manera instantánea,
sino que requiere un prolongado proceso de
atenciones y cuidados. Sin embargo, su lección
principal es que al enfrentar un desafío,
actuamos al mismo tiempo sobre muchos otros
problemas. El avance ininterrumpido en este
ámbito y la posibilidad de lograr nuevos
progresos en la reunión de Copenhague
y en otros foros también contribuiría
significativamente a la consecución
de los objetivos de desarrollo del Milenio.
En este Día Internacional, hagamos
la promesa de aprovechar mejor estas oportunidades
polifacéticas, y hacer todo lo posible
por crear hoy la “economía verde” de
mañana.