03
marzo 2009 - DF, México — Rechaza Europa
obligar a Austria y Hungría a cultivar
el maíz genéticamente modificado
MON810 de la multinacional Monsanto, como
pedía la Comisión Europea
El lunes 2 de marzo, los
países de la Unión Europea (UE)
se negaron a obligar a Austria y Hungría
a cultivar el maíz genéticamente
modificado MON810 de la multinacional americana
Monsanto, como pedía la Comisión
Europea.
Sólo cuatro países
- Reino Unido, Países Bajos, Suecia
y Finlandia --
apoyaron la propuesta de Bruselas, de pedir
a los ministros de Medio Ambiente de la UE
que votaran la suspensión de las cláusulas
de salvaguarda que impusieron los gobiernos
de Austria y Hungría a la variedad
transgénica MON810.
Todos los demás países
votaron en contra. Este resultado anticipa
una nueva derrota para la Comisión
Europea en su afán por votar para obligar
a Francia y Grecia a suspender sus moratorias
para ese cultivo.
La organización ambientalista
Greenpeace acoge con satisfacción el
resultado como "una victoria para el
medio ambiente, los agricultores y los consumidores”.
La Comisión ya había fallado
el 6 de febrero en un primer intento de obligar
a Francia y Grecia a permitir la reanudación
del cultivo de maíz transgénico
de Monsanto, en una votación de la
Comisión Permanente de la Cadena Alimentaria
y de Sanidad Animal de la UE.
“Este contundente voto en
contra de cultivos transgénicos peligrosos
debe ser un ejemplo para el gobierno mexicano.
No obstante, el gobierno de Felipe Calderón
sigue pugnando, en complicidad con las empresas
transnacionales por autorizar la siembra de
maíz transgénico en territorio
mexicano, el cual es centro de origen y diversidad
genética del grano por lo que el riesgo
es aún mayor ya que nuestra gran diversidad
de maíces puede verse afectada por
la contaminación transgénica”,
declaró Aleira Lara, coordinadora de
agricultura sustentable y transgénicos
de Greenpeace.
“Esta variedad que se ha
prohibido en los cuatro países (Grecia,
Francia, Austria y Hungría) por sus
impactos negativos al medio ambiente es una
de las que se ha detectado en la semilla que
se distribuye en el Valle de Cuauhtémoc,
Chihuahua. La siembra de maíz transgénico
en nuestro país es ilegal. Sin embargo
el gobierno mexicano ha permitido, sistemáticamente,
el ingreso de grano y semilla de maíz
contaminada con organismos genéticamente
modificados”, concluyó Lara.
+ Más
España da un giro
histórico y apoya las prohibiciones
europeas contra los transgénicos
Greenpeace resalta la importancia
del voto de España en apoyo a las moratorias
de Austria y Hungría - 02 marzo 2009
- España — Greenpeace considera que
la votación de hoy en el Consejo de
Ministros de Medio Ambiente de la Unión
Europea (UE) representa una gran victoria
para el medio ambiente, los agricultores y
los consumidores de toda la UE. Los ministros
de la UE han rechazado masivamente la propuesta
de la Comisión Europea de pedir al
Consejo que forzase a determinados estados
miembros a cultivar transgénicos.
Más de 20 países
han votado en contra de la Comisión,
entre ellos España, que ha dado un
giro a la actual política a favor de
los transgénicos.
Con este resultado, Hungría
puede mantener su prohibición al cultivo
del maíz de Monsanto MON 810. Asimismo,
Austria puede seguir prohibiendo el cultivo
de este mismo maíz y de otro de Bayer,
el T25.
“Por cuarta vez los países
de la UE tiran por tierra una propuesta de
la Comisión de dinamitar las moratorias
nacionales, claros ejemplos de la soberanía
de los estados”, ha afirmado Juan-Felipe Carrasco,
responsable de la campaña de transgénicos
de Greenpeace.
Recientemente las autoridades
científicas de Austria y de Hungría
han aportado nuevas evidencias de los impactos
de los transgénicos para apoyar y legitimar
sus moratorias. Por ejemplo, el maíz
MON 810, único transgénico autorizado
actualmente en la UE y cultivado en España,
tiene un elevado potencial de daños
al medio ambiente.
Greenpeace considera que
la protección del medio ambiente y
de la salud pública deben ser siempre
prioritaria con respecto a los intereses financieros
e industriales de un grupo de multinacionales.
Es importante recordar que España sigue
siendo el único país de la UE
que cultiva transgénicos a gran escala.
Es más, el Gobierno de España
toleró la presencia de 80.000 hectáreas
(ha) de maíz MON 810 en nuestros campos
(1), el mismo cuya prohibición ha apoyado
hoy.
“Es fundamental para el
futuro de los ciudadanos y del medio ambiente
que esta decisión española en
la UE sea ahora coherentemente trasladada
a la política nacional de transgénicos,
se prohíba el cultivo en España
y podamos sentir que nuestro Gobierno abandona
la senda de las transnacionales biotecnológicas
y apuesta definitivamente por la sostenibilidad
y la seguridad alimentaria” ha concluido Carrasco.
NOTAS:
(1) Según la web
del MARM, las principales superficies son:
31.857 ha en Aragón; 25.298 ha en Cataluña;
10.416 ha en Extremadura; 5.150 ha en Navarra,
4.739 ha en Castilla la Mancha; 1.372 ha en
Andalucía y 381 ha en Madrid.