Bogotá, 3 de junio
de 2009 (MAVDT).- Luego de recorrer distancias
que alcanzan hasta los 17.000 kilómetros,
centenares de ballenas jorobadas
o Yubartas (Megaptera novaeangliae) inician
su arribo a las zonas costeras del Pacífico
colombiano, para reproducirse.
Con la llegada de estos
mamíferos, pertenecientes al grupo
de los Cetáceos (que incluye a los
delfines), también migran a los sitios
de avistamiento decenas de turistas nacionales
y extranjeros que buscan observar un espectáculo
natural que se repite año tras año
hasta finales de noviembre.
De las 11 especies de ballenas
presentes en los mares del mundo, Colombia
es visitada por seis: la Ballena Azul, el
Rorcual Común, la Bryde, la Minke,
la Sei y la Jorobada o Yubarta. Se calcula
que al Pacífico llegan unas 1.200 que
se distribuyen en los Parques Nacionales Naturales
de Gorgona, Sanquianga y Utría.
Las Yubartas - llamadas
así porque arquean el lomo antes de
sumergirse- presentan características
especiales que las diferencian del resto de
los mamíferos de su género:
son la especie cetácea más acrobática,
y esos dotes de elasticidad se manifiestan
a través de saltos, coletazos, aletazos,
diferentes posturas corporales y giros en
la superficie del mar. Su longitud puede llegar
hasta los 18 metros; su colorido oscila entre
el gris y el negro, y presenta un vientre
blanco; y su peso alcanza hasta 40 toneladas.
Esto sin mencionar sus atractivos cantos que
pueden ser escuchados a más de 12 kilómetros
de distancia.
Las aguas cálidas
(25 grados de temperatura) de Bahía
Málaga y Bahía Solano, en la
ecorregión Chocó-Darién,
como las de Juanchaco, en el Valle, son las
que concentran mayor número de cetáceos,
por lo que estos lugares son los más
visitados para hacer avistamiento. La isla
Gorgona, donde también se congrega
gran número de ballenas, no está
autorizada para dicha actividad.
Ante el grado de amenaza
que enfrenta esta especie, en Colombia rigen
normativas que regulan su observación:
el tiempo máximo de permanencia ante
un grupo de ballenas es de 30 minutos; el
número de embarcaciones en avistamiento
no debe superar las cinco, y no se debe seguir
hembras con sus crías. La distancia
autorizada es de 200 metros. Actualmente hay
160 motoristas capacitados para apoyar tal
actividad.
La temporada ballenera deja
más de 700 millones de pesos al año
a los operadores turísticos de los
departamentos de Chocó y Valle del
Cauca.
Observar aves, la otra alternativa
Y si bien las Yubartas pueden
observarse solamente entre junio y noviembre,
las aves, por el contrario, pueden avistarse
en cualquier momento del año y en cualquier
lugar del país.
En el mundo se cuantifican 9.950 especies
de aves, de las cuales hay 3.300 en Latinoamérica.
Suramérica, en particular, registra
más de 3.000, cifra que ubica a Colombia,
Perú, Brasil, Ecuador, Venezuela y
Bolivia, entre los diez países con
mayor diversidad de aves en el mundo.
Colombia cuenta con 1.762
especies distribuidas así: en la región
Andina, 974; en la región Caribe, 951;
en la Amazonia, 868; en el Pacífico,
830, y en la Orinoquia, 644. De la misma manera
el país presenta 67 especies endémicas
y 162 amenazadas.Estas cifras ubican a Colombia
como un lugar privilegiado para la observación
de aves durante todos los meses del año.
Este es un pasatiempo interesante
y divertido que se puede practicar en jardines,
parques, en las áreas verdes que rodean
las ciudades, las plantaciones, las orillas
de ríos, lagos, costas, humedales,
bosques y áreas protegidas como parques
nacionales naturales o reservas de la sociedad
civil.
En la actualidad, el territorio
nacional cuenta con cerca de 120 Áreas
Importantes para la Conservación de
las Aves de Colombia (AICAS ), zonas que conforman
una valiosa red para proteger la diversidad
natural de la avifauna que habita nuestra
nación.
CIFRAS
La gestación de una
ballena dura un año, y sólo
tiene una cría cada tres. Al nacer
la cría mide 3 metros y pesa 2 y media
toneladas. Son mamíferos que ingieren
entre 75 y 150 litros diarios de leche rica
en grasa. Esto les permite engordar rápidamente
para no congelarse durante su regreso a las
zonas polares.
Las ballenas tienen un ciclo
de vida aproximado de 100 años. Estos
animales iniciaron su proceso evolutivo hace
50 millones de años a partir de una
especie similar a un perro o un lobo hasta
convertirse en los cetáceos actuales,
hace 15 millones de años.
A las yubartas se les conoce como las ballena
de las "grandes alas" por sus grandes
aletas pectorales que llegan a medir 5 m.
Según la Unión
Internacional para la Conservación
de la Naturaleza (UICN), (por sus siglas en
inglés), Colombia cuenta con 162 especies
de aves amenazadas: 50 pertenecen a la categoría
de vulnerables (VU), 43 en peligro (EN), 40
casi amenazado (NT), 19 en peligro crítico
(CR) 9 con datos insuficientes (DD) y uno
extinto.
El programa de Áreas de Importancia
Internacional para la Conservación
de Aves (AICAS), funciona en 90 países
de 6 continentes.
¿QUÉ HACER?
1. Antes de iniciar una
observación, documentarse sobre las
ballenas y las aves.
2. Unirse a grupos de trabajo
en campo, con experiencia en estas especies
3. Apoyar campañas
de protección y conservación
que se realicen en el país.
DATOS
La Yubarta o Jorobada arriba
a las playas de Nuquí, Bahía
Solano y Bahía Málaga a dar
a luz a sus crías a mediados del año.
Esta última región, según
mediciones, tiene la tasa de nacimientos de
ballenas más alta del mundo, con el
28 por ciento del total. Allí, además
de tener sus bebés, se aparean, crían
a sus recién nacidos y llevan a cabo
procesos de socialización. Luego, las
ballenas regresan en grupo a la Antártida
para consolidar un ciclo de alimentación
que las expone a la cacería.
En Colombia, una amenaza importante para las
ballenas proviene del acoso por parte de embarcaciones
de turismo para su observación. Este
turismo se inició en 1994, y ha tenido
un alto crecimiento. Otra amenaza para estos
cetáceos es la degradación de
los ambientes costeros donde se reproducen.
Aparte del hombre, los únicos enemigos
naturales son algunas especies de tiburones
y otros cetáceos como la orca y orca
falsa.
Es recomendable observar
aves al amanecer y durante las primeras horas
de la mañana, cuando están buscando
alimento o cantando. También las últimas
horas de la tarde ofrecen una buena ocasión
para observarlas ya que se movilizan en busca
de alimento y de un sitio donde dormir.