Greenpeace exige
al CSN que publique en su web información
veraz y en tiempo real del estado operativo
del parque nuclear - 06 agosto 2009 - Madrid,
España — Greenpeace denuncia que el
Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) publica
en su web información errónea
relativa a los estados operativos de las centrales
nucleares, en concreto, sobre potencia eléctrica
en funcionamiento. Según los datos
del CSN, hay más de 300 Megavatios
(MW) de potencia nuclear que están
funcionando por encima de lo real, que son
los datos que muestra en tiempo real Red Eléctrica
Española (REE).
La organización hace
hincapié en que no es un error puntual
sino que es la tónica general, como
se puede comprobar en las respectivas páginas
web del CSN y REE. Así, la potencia
nuclear en funcionamiento a las 9:00 de ayer
5 de agosto era de 7.162 MW según REE
(1), mientras que según el CSN (2),
a esa misma hora de ese mismo día era
de 7.491 MW (3).
Esta discrepancia entre
los datos reales, que registra y publica en
tiempo real REE, y los del CSN (que siempre
registran una potencia nuclear en funcionamiento
superior a la real) no tiene explicación
técnica, dado que la Sala de Emergencias
(SALEM) del CSN tiene conexión con
el sistema de gestión de REE y recibe
en tiempo real la información relativa
a la potencia nuclear en funcionamiento para
cada central.
“Greenpeace exige al CSN
que haga gala de la transparencia y modernidad
de la que presume su Presidenta, Carmen Martínez
Ten, y publique en su web oficial información
veraz y en tiempo real del estado operativo
del parque nuclear español” ha declarado
Carlos Bravo, responsable de la campaña
Nuclear de Greenpeace.
NOTAS:
(1) https://demanda.ree.es/demanda.html
(2) Ver en “Actualidad y Datos”, “Estados
operativos”:
http://www.csn.es/index.php?option=com_centrales&view=centrales&Itemid=31&lang=es)
(3) Los datos para cada
central en la página web del CSN son:
Garoña: 464 MW; Almaraz-1:
963 MW; Almaraz-2: 964 MW; Cofrentes: 986
MW; Trillo: 1058 MW; Vandellós-2: 1.050
MW; Ascó-1: 1000 MW; Ascó-2:
1006 MW. En total: 7.491 MW. Una diferencia
de 329 MW con respecto a los datos reales,
de REE
+ Más
Nestlé se niega a
dar a Greenpeace garantías de ausencia
de transgénicos en sus productos
La multinacional alimentaria
tiene en sus manos salir de la lista roja
si aporta a Greenpeace la documentación
sobre su política de OMG - 07 agosto
2009 - Madrid, España — Ante la reacción
de Nestlé tras su aparición
en la lista roja de la Guía Roja y
Verde de Alimentos Transgénicos, Greenpeace
recuerda que la multinacional alimentaria
no ha ofrecido garantías de la no utilización
de OMG (Organismos Modificados Genéticamente).
Nestlé afirmó que no emplea
transgénicos en la elaboración
de ninguno de sus productos “ya que el consumidor
no está a favor de estas materias primas”.
Sin embargo, a pesar de los continuados esfuerzos
de Greenpeace, no ha entregado a la organización
ecologista la documentación que lo
prueba.
Mientras Nestlé asegura
en su web que su reto es la nutrición,
la salud y el bienestar de sus consumidores,
su compromiso es la búsqueda constante
de la calidad “desde la adquisición
de las materias primas hasta la presentación
final al consumidor” y su apuesta es la transparencia,
prefiere seguir ocultando a Greenpeace su
verdadera política de transgénicos.
“Es inaceptable que una
empresa que se compromete en su página
de internet a facilitar a sus consumidores
'toda la información sobre transgénicos
a través de todos los canales disponibles',
siga mostrando ese grado de opacidad con una
organización internacional que es una
de las referencias mundiales en materia de
OMG”, ha declarado Juan-Felipe Carrasco, responsable
de la campaña de Transgénicos
de Greenpeace.
Greenpeace recibe a diario
las dudas de muchos consumidores de Nestlé
preocupados por la falta de claridad en las
respuestas de la empresa a sus preguntas.
Nestlé afirma cumplir la legislación
y que si utilizaran transgénicos lo
harían constar en el etiquetado. Además
del reconocimiento implícito del posible
uso de transgénicos en un futuro que
esto significa, Greenpeace quiere recordar
que cumplir la legislación no significa
que el ciudadano deje de consumir transgénicos
dado que en España no se han desarrollado
los mecanismos de trazabilidad a los que obliga
la legislación Europea y por ello no
es fiable el hecho de que en la etiqueta de
un alimento no figuren ingredientes transgénicos.
Además, se permite la presencia de
hasta 0,9% de transgénicos sin obligación
de etiquetado.
Seis países de la
UE, entre los cuales se encuentran Francia
y Alemania, han prohibido el cultivo de transgénicos
basándose en amplios análisis
científicos. Cada vez hay más
datos sobre los peligros para la salud que
suponen los alimentos transgénicos;
es el caso de un estudio publicado por el
Gobierno de Austria que demuestra que la fertilidad
de ratones alimentados con el maíz
de Monsanto NK603xMON810 se ve seriamente
dañada. Numerosas evidencias describen
los impactos reales y potenciales sobre la
salud de maíces transgénicos,
como el MON863 (que España importa)
o el MON810 (que España importa y cultiva)
o la patata “Amflora” de BASF, cuya aprobación
el Gobierno apoya a pesar del rechazo por
parte de la Organización Mundial de
la Salud, el Instituto Pasteur o la Agencia
Europea del Medicamento.
La inmensa mayoría
de los fabricantes ha decido abandonar estos
peligrosos ingredientes. Atendiendo a la realidad
de los mercados de materias primas, es perfectamente
posible para una gran empresa rechazar los
transgénicos, como lo siguen haciendo
Kraft Foods, Santiveri, Coca Cola, Heineken
y tantas otras.
“Nestlé tiene en
sus manos convertir una mala noticia en buena.
Si quiere seguir siendo 'sinónimo de
seguridad y confianza para los consumidores',
como afirma en su página web, debe
ofrecer a aquellas organizaciones que representan
el sentir mayoritario de la sociedad civil
y de los consumidores toda la información
que acredite que definitivamente abandonan
el uso de ingredientes transgénicos”,
ha concluido Carrasco.
(1) http://www.greenpeace.org/espana/campaigns/transgenicos/consumo/gu-a-roja-y-verde