18 Sep 2009 - Garantizar
la supervivencia de los pequeños estados
insulares del Pacífico, el Mediterráneo,
el Índico y el Caribe depende de que
los países más
ricos y contaminantes asuman su responsabilidad
de alcanzar un acuerdo ambicioso en la próxima
cumbre de Copenhague en diciembre. De lo contrario,
según WWF, el futuro de estos países
puede verse amenazado por los efectos del
cambio climático, que podría
dejar a muchos de estos estados sumergidos
por el aumento de las temperaturas.
La próxima cumbre
de la Alianza de los Pequeños Estados
Insulares (AOSIS), que tendrá lugar
el próximo 21 de septiembre en Nueva
York, permitirá que dichos países
menos contaminantes, pero mucho más
expuestos a las consecuencias del calentamiento
global, manifiesten su situación crítica.
Hasta ahora, las negociaciones sobre clima
han estado dominadas por los países
más desarrollados y contaminantes.
Los estados insulares se
agrupan en la alianza AOSIS, que incluye a
43 miembros y suma 41 millones de habitantes.
Para estos países, un aumento del nivel
del mar podría ser catastrófico.
Las pequeñas islas ya están
sufriendo los impactos inmediatos del cambio
climático, como la inundación
de zonas costeras, la desaparición
bajo el mar de determinadas islas, la disminución
de recursos de agua dulce, fuertes sequías,
pérdida de los cultivos y aumento de
las enfermedades. Además, la acidificación
de los mares, como consecuencia de una mayor
presencia de CO2, está acabando con
los corales y amenaza las reservas de pesca,
que constituyen el primer sustento alimentario
de muchas comunidades.
La cumbre de esta alianza
coincidirá con una serie de reuniones
de alto nivel en Nueva York a partir de la
semana próxima. Entre ellas, las sesiones
preparatorias para la Cumbre de las Naciones
Unidas sobre clima en Copenhague y la reunión
el G20. Esto permitirá que estos países
amenazados manifiesten su preocupación
por los impactos del cambio climático
ante los países más poderosos.
Mar Asunción, Responsable
del Programa de Cambio Climático de
WWF España afirma: “Tenemos que romper
el círculo vicioso según el
cual los grandes países contaminantes
estudian medidas para combatir esta amenaza
entre ellos. Es totalmente absurdo debatir
sobre cambio climático sin prestar
atención a las demandas de los países
más afectados”.
WWF comparte la petición
de los estados miembros de AOSIS de solicitar
una acción inmediata y contundente
contra el cambio climático para garantizar
la supervivencia de estos pequeños
estados insulares.
Las políticas más
ambiciosas en cambio climático se refieren
siempre a un aumento de la temperatura de
2º C (con respecto a los niveles preindustriales)
como el máximo asumible por las economías
occidentales. Sin embargo, los estados insulares
temen que un incremento de tan sólo
1,5° C sea suficiente para inundar o salinizar
en exceso buena parte de su territorio.
Por eso, WWF pide un compromiso
global para mantener el aumento de la temperatura
por debajo de los 2º C, y considera que
las emisiones de gases de efecto invernadero
deben seguir descendiendo hasta lograr un
aumento de las temperaturas inferior a los
1.5º, límite propuesto por estos
pequeños estados.
+ Más
CC.OO., Ecologistas en Acción,
Greenpeace y WWF España proponen que
se premie fiscalmente a los transportes más
sostenibles
16 Sep 2009 - Este año,
la semana europea de la movilidad se celebra
del 16 al 22 de septiembre con el lema de
“Mejora el clima de tu ciudad”. Durante el
desarrollo de esta iniciativa, las organizaciones
sociales han venido proponiendo todos los
años medidas concretas para reorientar
las pautas del transporte, especialmente en
el ámbito urbano, fomentando el transporte
público y los modos no contaminantes
como la bicicleta. Para ello han planteado
la conveniencia de implantar planes de movilidad
tanto a nivel urbano y metropolitano, como
en empresas y polígonos industriales,
así como la necesidad de aprobar una
ley de movilidad que regule estas medidas.
Al hilo del debate que se está produciendo
en España sobre fiscalidad, CC.OO.,
Ecologistas en Acción, Greenpeace y
WWF España han presentado recientemente,
a través del Grupo Parlamentario de
IU-ICV, una propuesta de ley sobre fiscalidad
ambiental que incluye además de otras
materias elementos de fiscalidad en el transporte.
La propuesta incluye la
modificación del actual impuesto de
hidrocarburos eliminando la exención
del impuesto que ahora tienen los vuelos domésticos
y el cambio del impuesto de matriculación,
reforzando el vínculo introducido para
automóviles por la reforma de 2007
(ley 34/07) entre el tipo impositivo y las
emisiones de CO2 (aumentando el número
de categorías existentes y la tributación
de los vehículos de gran cilindrada
y todoterrenos). También se propuso
la modificación del IVA, donde se aplicaría
al transporte aéreo el tipo impositivo
normal en vez del reducido del que hasta ahora
disfrutaba.
La propuesta de ley de fiscalidad
plantea también beneficios para ciertas
inversiones y gastos en movilidad sostenible
como, por ejemplo, en el IRPF, la deducción
por adquisición de abonos de transporte
público por parte de los trabajadores,
en el impuesto de sociedades, la deducción
por gastos e inversiones en medidas de movilidad
sostenible en los desplazamientos de sus trabajadores
y en Impuesto de Actividades Económicas
(IAE), la bonificación a las empresas
que tengan transporte colectivo o plan de
movilidad.
Se trata con ello de modificar
comportamientos de ciudadanos y empresas en
relación con los modos de transporte
utilizados, fomentando los de menor impacto
ambiental y más eficientes energéticamente
y evitando las ventajas fiscales de las que
disfrutaban hasta ahora algunos de los más
contaminantes. Hay que utilizar las potencialidades
que ofrecen los actuales instrumentos fiscales
para fomentar un desarrollo sostenible e internalizar
los costes ambientales de determinados modos
de transporte.