La organización ecologista
demanda al Gobierno un mayor compromiso con
el medio ambiente durante su presidencia europea
- 14 enero 2010 - España — Con motivo
del Consejo informal de Ministros de Energía
y Medio ambiente de la Unión Europea,
el primero bajo la presidencia española,
que tendrá lugar en Sevilla del 15
al 17 de enero, Greenpeace ha lanzado un documento
con sus propuestas para que el Gobierno español
aproveche la oportunidad de liderazgo medioambiental
que le brinda la Presidencia de la Unión
Europea (UE).
La organización ecologista
pide al Gobierno español que durante
la presidencia incluya, dentro de sus prioridades
de recuperación económica y
creación de empleo, el impulso para
alcanzar un sistema energético basado
al 100% en energías renovables, como
herramienta fundamental en la lucha contra
el cambio climático, y un cambio radical
en la gestión de los ecosistemas marinos
a través de la reforma de la Política
Pesquera Común.
Para asegurar que el objetivo
de la presidencia de “Innovar Europa” se haga
realidad, Greenpeace destaca la necesidad
de cambios urgentes en tres ámbitos
políticos, desarrollados en el documento:
1. Política económica.
Una economía sostenible para la población
y para el planeta.
2. Política climática global.
Evitar la repetición de los errores
de Copenhague.
3. La reforma de la Política Pesquera
Común y la adopción de la nueva
legislación sobre madera.
España es reconocida
como uno de los líderes mundiales en
energías renovables y muestra de ello
es que ha alcanzado un 26% de electricidad
renovable en 2009. Greenpeace considera que
en la cumbre de marzo de Jefes de Estados
europeos se debería dar prioridad estratégica
a las energías renovables y a la eficiencia
energética dentro de las políticas
energéticas europeas, dado que la presidencia
española ha identificado correctamente
el Plan de Acción sobre Energía
de la UE para los años 2010-2014 como
una oportunidad para modernizar el suministro
energético de Europa. Además,
España debería impulsar a la
UE para desarrollar una visión de un
sistema energético 100% renovable para
2050, que beneficie tanto a la economía
como a los ciudadanos.
“España debe predicar
con el ejemplo, elevando su objetivo nacional
de energías renovables para 2020 al
30% y al 50% en electricidad”, ha declarado
José Luis García Ortega, responsable
de la campaña Cambio Climático
y Energía de Greenpeace.
La organización ecologista
ha señalado las siguientes prioridades
energéticas para que la presidencia
española logre desarrollar una economía
sostenible:
eliminar todas las subvenciones
a las tecnologías fósiles y
nucleares;
desarrollar redes inteligentes, incluyendo
estándares mínimos para redes,
aparatos y coches eléctricos;
centrar en renovables y eficiencia energética
las iniciativas sobre Financiación
de Tecnologías Bajas en Carbono;
cooperar con los gobiernos para aplicar la
directiva de renovables y el objetivo del
20% de energía renovable;
promover políticas estables de energías
renovables dentro del Plan Solar Mediterráneo;
promover incentivos financieros y mejoras
regulatorias para desarrollar redes eléctricas
marinas.
Una de las tareas que España
abordará durante la presidencia europea
es el debate de las primeras fases de la reforma
de la Política Pesquera Común.
Esta normativa determina qué, cómo,
cuánto y dónde pesca la flota
europea, lo que influye determinantemente
en la situación mundial de los océanos.
“España con una flota actual de 11.247
barcos y muy envejecida, ha de liderar estas
negociaciones, fomentando una reforma sostenible
que proteja al medio marino y a los pescadores”
ha declarado Celia Ojeda, responsable de la
campaña de Océanos de Greenpeace.
Además, la organización ecologista
pide que en esta reforma se tengan en cuenta
una reducción del esfuerzo pesquero,
un fomento de las pesquerías tradicionales,
una protección de las comunidades costeras
y el establecimiento de Reservas Marinas.
Asimismo, el gobierno español
concluirá el debate sobre la protección
del atún rojo Atlántico (Thunnus
thynnus) en los próximos tres meses,
cuando se decidirá si se incluye en
el Anexo I del Convenio CITES. Esto supondría
la prohibición de su comercio internacional
y, por lo tanto, el comienzo de la recuperación
de esta especie en peligro de extinción.
+ Más
La audiencia provincial
de Madrid absuelve a los activistas de Greenpeace
acusados por Endesa
La empresa pedía
un total de más de 14 años de
cárcel para todos los activistas, por
desplegar una pancarta en su fachada- 15 enero
2010 - España — La Audiencia Provincial
de Madrid ha desestimado las acusaciones de
la empresa eléctrica Endesa contra
activistas de Greenpeace, para los que pedía,
para todos ellos, de 14 años y ocho
meses de prisión, además de
unas sanciones que superarían los 80.000
euros.
La empresa denunció
a los activistas que en julio de 2008 descolgaron
una pancarta en la fachada de su sede en Madrid,
para protestar por sus proyectos de construcción
varias presas hidroeléctricas en la
Patagonia chilena. En la pancarta se leía:
“Buenos días Endesa: Si de verdad te
preocupa el futuro de los hijos de tus hijos,
no destruyas la Patagonia”. Aunque la protesta
se desarrolló en todo momento de forma
pacífica, la empresa acusó a
los activistas de coacciones, daños,
allanamiento de domicilio de persona jurídica
e injurias.
Ahora la Audiencia Provincial
de Madrid ha desestimado esas peticiones,
señalando que “la actuación
de los cuatro imputados, escalando la fachada
y colgando la pancarta, no supone una actuación
violenta o intimidatoria contra persona alguna”.
El tribunal indica que no existe constancia
de que los imputados realizaran ninguna conducta
concreta de carácter violento o compulsivo,
y que los únicos hechos que se les
pueden imputar son haberse subido a la fachada
y desplegado en ella una pancarta. La Audiencia
ha ordenado el sobreseimiento y el archivo
de las actuaciones, rechazando así
las acusaciones de la empresa y las peticiones
de penas de cárcel y sanciones económicas.
“Esta acción de Greenpeace
se desarrolló de manera pacífica,
como todas las que realizamos, por lo que
la petición de cargos era totalmente
desproporcionada. La empresa pretendía
intimidarnos”, ha señalado Mario Rodríguez,
director de Campañas de Greenpeace.
“Greenpeace va a continuar ejerciendo el derecho
a la protesta pacífica”.
La acción de Greenpeace
denunciaba los proyectos de la eléctrica
Endesa para construir cinco grandes represas
hidroeléctricas en la Patagonia chilena,
a través de su filial HidroAysén.
Este proyecto, que de llevarse a cabo tendría
un impacto ecológico muy grave, ha
generado una fuerte oposición de grupos
ecologistas y sociales en Chile y en todo
el mundo. La empresa tuvo que retirar la evaluación
de impacto ambiental de los proyectos ante
el elevado número de alegaciones recibidas,
y en estos momentos la cuestión sigue
bloqueada.
“Esperamos que Endesa abandone
definitivamente estos proyectos, que tendrían
un impacto gravísimo en una de las
últimas zonas vírgenes del planeta
y que han generado un alto grado de rechazo
entre la población local. No se puede
sacrificar un entorno como la Patagonia por
los intereses económicos de una empresa
privada. Además, Chile tiene otras
alternativas energéticas”, concluye
Mabel González, responsable de la campaña
de Conflictos y Medio Ambiente.