Posted on 27 enero 2010
- El ganadero que envenenó un quebrantahuesos
en la sierra de Castril (Granada) ha sido
condenado a 18 meses de cárcel
Hoy ha sido condenado en
Granada el ganadero que fue sorprendido en
mayo de 2008 colocando varios trozos de carne
envenenada en el Parque Natural de la Sierra
de Castril. Pocos días antes, en el
mismo lugar, se había localizado el
cadáver del quebrantahuesos ‘Segura’
que portaba un dispositivo emisor para su
seguimiento.
Hoy se celebraba el juicio
por el envenenamiento de una hembra de quebrantahuesos,
nacida en 2007 en el Centro de Cría
de Cazorla, liberada en la Sierra de Segura
(Jaén) dentro del Programa de Reintroducción
del Quebrantahuesos. Su cadáver fue
localizado gracias al emisor satélite
GPS que portan todos los ejemplares liberados
en Andalucía. Los hechos pudieron ser
descubiertos tras una investigación
del SEPRONA y agentes de medio ambiente, que
ya estaba sobre la pista de varios casos de
envenenamiento reiterados en la zona.
Un año antes, en
la misma localidad granadina, fue abatido
a tiros Acebeas, otro ejemplar de quebrantahuesos
reintroducido.
El Quebrantahuesos se extinguió
en Andalucía en 1986, cuando desaparecía
de la Sierra de Cazorla el último ejemplar
de la especie. Esta rapaz pasaba pues a engrosar
la lista de especies desaparecidas por el
veneno en España, subsistiendo solamente
un pequeño reducto de su población
en la cordillera de los Pirineos.
El caso ahora juzgado es
un ejemplo de uso ilegal de veneno por ganaderos,
frecuente en distintas zonas de Andalucía,
como la Sierra de Ronda, Sierra Sur de Jaén,
las sierras de Córdoba, y distintas
zonas de Sierra Morena, en las provincias
de Sevilla, Jaén y Huelva.
El veneno supone el principal
factor de mortalidad para especies en peligro
de extinción, como las grandes rapaces
o el oso pardo. La utilización de cebos
envenenados, como método de eliminación
de depredadores, está tipificado como
delito desde 1996. El veneno afecta gravemente
a especies entre las que figuran buitres,
alimoches, águilas, milanos y otras
rapaces de hábitos carroñeros.
Para Carlos Cano, Coordinador
del Proyecto contra el Veneno de WWF España:
“esta sentencia es ejemplarizante y contribuye,
al menos, a tres cosas importantes: que quienes
utilizan el veneno tengan muy claro la ilegalidad
del método, que las sanciones pueden
llegar a ser muy duras y que la administración
vigila cada vez más de cerca estas
prácticas que acaban con nuestras especies
más emblemáticas”.
Más información
sobre el veneno en Andalucía
En Andalucía se ha
detectado un elevado uso del veneno por parte
de los ganaderos, dirigido a la persecución
de zorros y perros en época de cría
del ganado, sobre todo, ovino y caprino. Quizá
el caso más conocido por su recurrencia
y permanencia en el tiempo es el de la Serranía
de Ronda (Málaga), donde desde hace
más de veinte años se vienen
documentando mortandades periódicas
de buitres leonados y alimoches, llevando
a esta última especie a una situación
de práctica extinción en la
zona, como le ocurrió antes al quebrantahuesos.
En distintas montañas
andaluzas se da el fenómeno de la llamada
‘ganadería absentista’, en la que muchos
de los propietarios mantienen un número
de cabezas de ganado sin ningún tipo
de vallado, protección o cuidados,
con el único propósito de obtener
diversas subvenciones. Esta situación
hace que en época de partos las crías
sean extremadamente vulnerables al ataque
de los depredadores, situación que
los ganaderos solucionan mediante el uso indiscriminado
de veneno.