Los gobiernos han antepuesto
los intereses económicos a la conservación
de especies en peligro de extinción
- 25 marzo 2010 - España — Greenpeace
lamenta que la XV Convención sobre
el Comercio Internacional de Especies Amenazadas
de Fauna y Flora Silvestres (CITES)
haya antepuesto los intereses económicos
a la conservación de numerosas especies
que se encuentran en peligro de extinción.
Los gobiernos reunidos en CITES, un organismo
de las Naciones Unidas, han fallado al no
acordar la urgente necesidad de la prohibición
del comercio internacional de atún
rojo (Thunnus thynnus), que ahora se enfrenta
a su extinción. También han
decidido llevar a la extinción a numerosas
especies de tiburones y corales.
La organización ecologista
lamenta que los países hayan antepuesto
los intereses económicos a la prohibición
del comercio internacional de especies que
se encuentran en peligro de extinción.
Este año, que es el año internacional
para la Biodiversidad Mundial, donde los científicos
están alarmando sobre el descenso global
en la biodiversidad. Sin embargo, los resultados
de CITES, sobre todo para las especies marinas,
ha sido desastroso.
“En el año de la
Biodiversidad, los gobiernos han decidido
condenar a la extinción a numerosas
especies”, ha declarado Celia Ojeda responsable
de Océanos de Greenpeace. “Esta conferencia
ha sido un desastre para la conservación
de las especies.”
El número de representantes
de la delegación japonesa era mayor
que en otros años y han desarrollado
un lobby agresivo para las propuestas que
no les gustaban, particularmente han boicoteado
cualquier tipo de protección para el
atún rojo. Aunque la UE y EE UU apoyaban
esta propuesta de protección no han
sido capaces de contrarestar la fuerte presión
japonesa.
“Gobierno japonés
es el enemigo número uno de la conservación
de las especies, particularmente cuando ésta
se interpone en sus intereses económicos”,
ha añadido Ojeda. “Dado su comportamiento
en CITES es irónico que Japón
albergue en octubre de este año la
Convención para la Biodiversidad (CBD)”.
Esta cumbre también
ha servido para constatar la falta de liderazgo
en protección de la UE, que también
ha antepuesto cualquier interés económico
a corto plazo a la protección de las
especies. España, como presidenta europea,
no ha sabido lidiar en una cumbre pequeña,
lo que deja claro que se necesita un nuevo
enfoque en que la gestión de los océanos.
+ Más
Greenpeace considera un
éxito la retirada del Decreto del carbón
Como ya advirtió
la organización ecologista, la normativa
del Gobierno que prima la quema de carbón
nacional no ha pasado el filtro de la Comisión
Europea - 26 marzo 2010 - España —
Greenpeace valora como un éxito la
noticia sobre la retirada del Decreto 134/2010,
que aprobó el mes pasado el Consejo
de Ministros, para apoyar la quema de carbón
nacional en las centrales térmicas
españolas. La decisión ha sido
adoptada tras conocer la oposición
de la Comisión Europea a la medida.
La organización ecologista, que había
presentado alegaciones a la normativa, se
estaba planteando recurrirla judicialmente.
“Los hechos demuestran que
las renovables ya han derrotado al carbón
y no deja de ser paradójico que el
Gobierno se empeñe en resucitar un
sector destinado a desaparecer mientras bloquea,
cada vez más, el desarrollo de uno
de los sectores punteros en España:
el de las energías renovables”, ha
declarado José Luís García
Ortega, responsable de la Campaña de
Cambio Climático y Energía de
Greenpeace. Como ejemplo, este mediodía,
según los datos de Red Eléctrica
de España, las renovables cubrían
casi el 60% de la demanda (27,8% sólo
la eólica), mientras que el carbón
aportaba un 2,4%.
El Gobierno ya está trabajando en una
nueva versión, que Greenpeace considera
innecesaria porque resulta totalmente injustificado
promover económicamente la quema de
carbón nacional al tiempo que se indemniza
a las centrales perjudicadas por esta medida.
La organización ecologista recuerda
que el pasado mes de septiembre, España
se comprometió ante el G8 a eliminar
de su ordenamiento jurídico las subvenciones
a los combustibles fósiles, por lo
que es incongruente que en febrero de 2010,
y en plena crisis económica, aprobase
la aportación de más de 4.500
millones al sector, repercutiendo este gasto
en la tarifa y, por lo tanto, al consumidor
final.
En concreto, los puntos en los que Greenpeace
fundamentó sus alegaciones al Real
Decreto 134/2010 son los siguientes:
?Se basa en pretendidas
restricciones por garantía del suministro
que son totalmente innecesarias dado el actual
panorama energético
?español y, por lo tanto, constituyen
un supuesto falso.
?Supone un parche para retrasar artificialmente
la inevitable desaparición de un sector
no competitivo y altamente contaminante como
el del carbón, aumentando los costes
totales del sistema eléctrico y alterando
las reglas del mercado.
?Tiene un gran impacto económico injustificable
en un momento de crisis como el actual.
?No favorece el empleo y detrae fondos públicos
que deberían emplearse en la promoción
de sectores estratégicos para el futuro
del sector energético y de la economía
española.
?Perjudica a las energías renovables
y, en general, al medio ambiente, siendo totalmente
incompatible con las medidas que exige la
lucha internacional contra el cambio climático.
?Se opone frontalmente a la normativa europea
en la materia.
“Es lamentable la imagen que España
está dando en plena presidencia europea,
recibiendo un varapalo de la Comisión
Europea por subvencionar el carbón,
el combustible que más contribuye al
cambio climático. No es de extrañar
que el Gobierno polaco -el que más
apuesta por el carbón en Europa- identifique
a España como el posible aliado ideal
a la hora de frenar el avance de la UE en
la lucha internacional contra el cambio climático
[1], ha concluido Vila.
Nota:
[1] Según ha trascendido en la prensa
polaca, el Primer Ministro Donald Tusk mandó
hace unos días una carta pidiendo al
Presidente Zapatero que establezca como prioridad
en la UE la inversión en grandes proyectos
de infraestructuras en lugar de apostar por
un “plan de rescate verde”.http://www.thenews.pl/business/artykul128070_eu-should-reform---like-poland-has--says-tusk.html
+ Más
Agricultores, Ecologistas
y Consumidores denuncian en el Parlamento
Europeo los impactos socioeconómicos
de los transgénicos en España
Los graves impactos ocasionados
por la introducción de cultivos transgénicos
en España son un ejemplo para el resto
de países de Europa - 24 marzo 2010
- España — Esta mañana, representantes
de Amigos de la Tierra, Greenpeace, la Coordinadora
de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos
(COAG), la Confederación de Consumidores
y Usuarios (CECU) y la Coordinadora Europea
Vía Campesina han presentado en el
Parlamento Europeo un informe sobre los impactos
socioeconómicos de los transgénicos
en España. En algunos casos de agricultores
ecológicos contaminados por transgénicos,
las pérdidas alcanzan hasta 26.000
euros por campaña [1].
Actualmente se discute la
evaluación de estos impactos en el
ámbito europeo antes de aprobar un
cultivo transgénico. España
es el único país de la UE que
los cultiva a gran escala, y debido a la desastrosa
situación de contaminación generalizada
que sufre y a la absoluta falta de transparencia
y control debe ser un ejemplo a tener en cuenta
la hora de valorar el cultivo de transgénicos
en el resto de Europa.
El Consejo de Ministros
de Medio Ambiente de la UE aprobó en
diciembre de 2008 considerar los impactos
socioeconómicos a la hora de evaluar
la aprobación de un cultivo transgénico.
Actualmente, tras consultas a los estados
sobre su experiencia sobre el tema, esta en
discusión en Bruselas y habrá
una propuesta en junio. El Gobierno español
aporta una visión completamente distorsionada
de la realidad sobre estos impactos. Por ejemplo
negando en público, aunque reconociendo
en privado, los casos de contaminación
por transgénicos. Por ello, las organizaciones
han preparado un completo documento con todas
las referencias disponibles sobre la auténtica
situación en España, denunciando
también la enorme dificultad y oscurantismo
existente para obtener datos sobre estos impactos.
Algunas de las características
que definen la experiencia del cultivo de
transgénicos en España en este
ámbito son [2]:
?-La pérdida del
mercado de maíz ecológico por
contaminación transgénica, lo
que supone la desaparición del sector
del maíz ecológico y una enorme
dificultad de producir incluso maíz
convencional en determinadas zonas.
?-Daños a iniciativas sociales, al
desarrollo rural y a otros sectores, como
el sector de la producción y compra
de cereales de cultivo ecológico, la
transformación en harinas y la elaboración
de productos de panadería.
?-La pérdida de mercado de gluten de
maíz convencional por contaminación
por transgénicos y venta a menor precio
para piensos animales;
?-La pérdida de piensos ecológicos
al estar contaminados por transgénicos
y el coste de reemplazarlos por piensos no
contaminados;
?-La subida de precios de los piensos ecológicos
para ganadería ecológica debido
tanto al sobre coste de adquirir maíz
ecológico no contaminado como a la
subida del precio de elementos alternativos.
?-El alto coste de los análisis para
asegurar la no presencia de transgénicos,
que asumen los agricultores que no los cultivan.
?-La contaminación de las semillas
no transgénicas.
?-La contaminación generalizada por
transgénicos de los alimentos a la
venta en supermercados que contienen soja
o maíz, incluyendo leches infantiles,
papillas o galletas.
?-La imposibilidad de establecer seguros agrarios
que cubran los daños producidos por
los transgénicos
Frente a la situación
que se vive con los transgénicos, la
sociedad española se movilizará
durante el mes de abril, incluyendo una manifestación
estatal el próximo 17 de abril en Madrid
contra la política del ministerio del
Medio Ambiente, Rural y Marino [3].
Notas:
[1] Ver caso de July Bergé,
agricultor de Bellcaire de Urgell), pág
15 del informe.
[2] El documento en:
http://www.greenpeace.org/espana/reports/100324-01
[3] La convocatoria y un
calendario de movilizaciones está disponible
en:
http://noquierotransgenicos.wordpress.com/