29 abril 2010 - Buenos Aires,
Argentina — La organización ambientalista
alertó hoy sobre el aumento en la generación
de basura electrónica que provocará
el creciente recambio de televisores en Argentina.
Greenpeace advirtió que las ventajas
del financiamiento
en cuotas, las innovaciones tecnológicas
y el “efecto” Mundial 2010 están provocando
una progresiva actualización del parque
de televisores. Esta tendencia se acentuará
en los próximos años a raíz
de la incorporación de la televisión
digital en el país con el llamado “apagón
analógico”.
Greenpeace alertó
hoy sobre el impacto en la generación
de basura electrónica que provocará
el creciente recambio de televisores en Argentina.
Con un vehículo caracterizado como
un camión recolector de residuos domiciliarios
volcando una montaña de televisores
descartados y en desuso, la organización
ambientalista presentó su informe “Recambio
de televisores: la explosión de la
basura electrónica” (1).
Según Greenpeace,
en los últimos 5 años -2005
a 2009- se vendieron en el país 11
millones de televisores, lo que representa
en promedio 1 televisor por hogar. De acuerdo
a las estimaciones se proyecta que, en los
próximos 4 años, se agreguen
otros 10 millones de equipos al parque actual,
lo que representa un incremento del parque
de televisores en más de 20 millones
de unidades en menos de 10 años.
Según la organización
ambientalista, las ventajas del financiamiento
en cuotas en los centros comerciales por el
“efecto” Mundial 2010 y la reciente irrupción
de los modelos de grandes formatos de pantalla
plana (plasmas, LCDs, LEDs y próximamente
3D) están provocando en Argentina un
creciente recambio de televisores. Además,
advirtió que esta tendencia creciente
se acentuará en los próximos
años a raíz de la progresiva
incorporación de la televisión
digital en el país, el llamado “apagón
analógico”, cuando deje de emitirse
señal televisiva “por aire” y toda
la programación sea emitida digitalmente.
“Por el volumen y velocidad
de recambio, el televisor se ha convertido
en uno de los principales equipos que engrosarán
las crecientes cantidades de residuos electrónicos
generados en nuestro país”, señaló
Yanina Rullo, integrante de la Campaña
de Residuos Electrónicos de Greenpeace,
y agregó; “el “apagón analógico”
será el mayor impulso al recambio de
televisores, como está sucediendo en
otros países. Si bien los televisores
tienen un reuso mayor comparado a otros aparatos,
esta tendencia se reducirá ya que los
viejos equipos no lograrán captar las
ventajas y funcionalidades de la era digital”.
En promedio el televisor
“principal” de cada hogar argentino ha sido
renovado en los últimos cinco años,
sumándose a los ya adquiridos o desplazándolos.
Desde el año 2003 las ventas de equipos
receptores han registrado un aumento. La proyección
para este año indica que se venderán
entre 2,1 a 2,5 millones de televisores, de
acuerdo a las expectativas de la industria.
Estas ventas son impulsadas especialmente
por el Mundial de Fútbol de Sudáfrica.
“Ante a este crecimiento
en el recambio de televisores, Argentina no
cuenta con ninguna infraestructura formal
para hacer frente a la basura electrónica
y gestionar este tipo de residuos”, señaló
María Eugenia Testa, directora Política
de Greenpeace. “Cuanto más se retrase
la implementación de políticas
para la gestión diferencial de esta
corriente de desechos, mayor será la
cantidad de residuos electrónicos acumulados
a ser tratados y mayores los costos de reparación
ambiental”.
Los equipos de televisores
y gran parte de los aparatos eléctricos
y electrónicos descartados en nuestro
país terminan en rellenos sanitarios
o basurales a cielo abierto, con un agravante:
tienen un grado mayor de toxicidad que los
residuos domiciliarios comunes. Por otro lado,
los nuevos equipos de LCD contienen una mayor
proporción de contaminantes que la
“vieja” tecnología de tubos de rayos
catódicos y un ciclo de vida esperado
menor. Con la era digital, además,
otros aparatos caerán en desuso, por
ejemplo DVD y videos, ya que no son compatibles
con los decodificadores.
“Desde Greenpeace demandamos
la aprobación de una ley nacional para
la gestión de estos residuos que establezca
la Responsabilidad Individual del Productor,
que implica que los productores tomen responsabilidad
legal y financiera (como mínimo) del
ciclo de vida completo de sus propios productos,
incluyendo los costos de recolección
y tratamiento al final del ciclo de vida”,
concluyó Testa.
Nota:
(1) Recambio de televisores:
la explosión de la basura electrónica.
http://www.greenpeace.org/argentina/contaminaci-n/informe-recambio-tv-basura-electronica
Elaborado en base al Informe La Tele es e-basura:
Cuantificación del impacto de la renovación
de equipos receptores de televisión
en Argentina, de Alejandro Prince, Consultora
Prince & Cooke para Greenpeace Argentina.
+ Más
ONG respaldó el proyecto
de ley de Basura Electrónica
22 abril 2010 - Buenos Aires,
Argentina — Greenpeace acompañó
hoy la presentación pública
del proyecto de Ley de Presupuestos Mínimos
de Gestión de Residuos de Aparatos
Eléctricos y Electrónicos, que
se llevó a cabo en la sala Eva Perón
del Senado de la Nación. La ONG y otras
organizaciones de la sociedad civil colaboraron
trabajando durante más de dos años
para alcanzar un texto de ley consensuado.
Greenpeace ha venido reclamando
por una Ley de “Basura Electrónica”
que cree la infraestructura para la gestión
de los residuos de aparatos eléctricos
y electrónicos, la fracción
de los residuos domésticos que más
rápido está creciendo y que
más componentes tóxicos contiene.
Semanas atrás, la organización
ambientalista denunció que 10 millones
de teléfonos celulares serán
descartados este año en el país.
Este descarte de equipos se suma al de televisores,
computadoras, pilas y baterías y aparatos
línea blanca entre otros, que hoy terminan
en rellenos o basurales e incluso son incinerados.
“Se necesita de manera urgente
comenzar a reciclar, reutilizar y recuperar
los materiales contenidos en los aparatos
electrónicos que hoy estamos tirando,
literalmente, a la basura. El recambio tecnológico
de estos equipos hace que sean la fracción
de residuos que más rápido crece,
con el agravante de contener sustancias peligrosas,
como metales pesados, y por otro lado, materiales
valiosos, como el oro, el cobre y el platino
que son enterrados una vez que los aparatos
son descartados”, señaló María
Eugenia Testa, directora Política de
Greenpeace.
Entre los puntos principales
del proyecto de ley se establece la Responsabilidad
Extendida del Productor, principio impulsado
por Greenpeace, que hace responsable legal
y financieramente a los productores de estos
aparatos durante el ciclo de vida completo
de los mismos, desde la fase inicial de la
producción hasta su gestión
final cuando finaliza su vida útil.
El texto de ley además establece la
prohibición de sustancias tóxicas
en los aparatos, lo que va en sintonía
con la legislación internacional al
respecto.
“La Responsabilidad Extendida
del Productor apunta a que los fabricantes
extiendan la vida útil –durabilidad-
de sus productos, se orienten al eco diseño
y realicen productos fácilmente desmontables
y reciclables libres de sustancias contaminantes.
Cuanto más se retrase la implementación
de políticas que promuevan la responsabilidad
del productor para estos desechos, mayor será
la cantidad de residuos electrónicos
acumulados a ser tratados y mayores los costos
de reparación ambiental”, señaló
Testa.
Como ejemplo del nivel de
descarte tecnológico Greenpeace publicó
en marzo pasado el informe “El lado tóxico
de la telefonía móvil” en el
cual denunció que el descarte de teléfonos
móviles aumentó 4 veces en los
últimos 5 años. El incremento
en el consumo, la escasa vida útil
de los productos (estimada en menos de 3 años)
y las altas cifras de descarte conviven con
un reducido circuito de reciclado. Hoy se
recicla menos del 6% del total de los residuos
provenientes del sector de tecnología.
El proyecto de ley de Basura
Electrónica fue presentado conjuntamente
por su autor, el Senador Nacional, Daniel
Filmus; la Directora Ejecutiva del Instituto
Nacional de Tecnología Industrial (INTI),
Dra. Leila Devia; el Director de Campañas
de Greenpeace, Juan Carlos Villalonga; la
Directora Ejecutiva de Fundación Equidad,
Carolina Aniño; el vicepresidente de
la Fundación Ambiente y Sociedad, Roberto
Felicetti y director de la empresa operadora
Silkers, el Lic. Gustavo Protomastro, entre
otros.