13 mayo 2010
DF, México — Sin considerar impactos
negativos al ambiente y serios riesgos para
el consumo humano, intentan legitimar liberación
en campo mexicano de cultivos transgénicos.
Convocado por la Cámara
de Diputados y el Centro de Estudios para
el Desarrollo Sustentable y la Soberanía
Alimentaria (Cedrssa) este 12 de mayo se llevó
a cabo el “Foro de Consulta sobre Ingeniería
Genética de Organismos Genéticamente
Modificables”, que resulto ser un foro no
de consulta sino de promoción del uso
de transgénicos en territorio mexicano.
No obstante la intención de minimizar
argumentos de precaución ante los cultivos
de transgénicos, la siempre ética
participación de investigadores que
integran la Unión de Científicos
Preocupados por la Sociedad (UCCS), logró
colocar en el foro una demanda contundente
para prohibir la comercialización de
maíz transgénico en México,
parte del centro de origen y diversificación
del maíz.
Los científicos presentaron
argumentos que demuestran las insuficiencias
y daños de los transgénicos
en agricultura, que no tienen los rendimientos
que se han anunciado y que por el contrario,
son los culpables de los gases de efecto invernadero
así como de serios riesgos en la salud
de quienes los consumen.
Los pocos agricultores invitados
externaron que los costos de los cultivos
transgénicos también plantean
una afectación a la economía
de los productores. La contaminación
transgénica impide la certificación
orgánica y por lo tanto el cierre de
mercados.
“Es realmente preocupante
que este tipo de foros, que tienen como meta
acercar tópicos e información
sobre los organismos genéticamente
modificados a legisladores, se den tardíamente
y con un sesgo evidente hacia la promoción
de los cultivos transgénicos. Actualmente
en el país se está experimentando
a campo abierto con maíz transgénico
y el evento de ayer, más que acercar
información a los legisladores para
implementar un régimen de protección
de la riqueza genética del país,
pretendió legitimar la liberación
comercial del maíz transgénico
en campo mexicano”, denunció Aleira
Lara, coordinadora de la campaña de
agricultura sustentable y transgénicos
de Greenpeace.
Cínicamente las empresas
de transgénicos se empeñan en
dar nformación falsa. A pesar de la
acumulación de evidencias de la contaminación
de cultivos transgénicos a cultivos
nativos y de que las promesas de combate a
insectos y resistencia a herbicidas han demostrado
su fracaso.
Las participaciones de los
expertos que han mantenido una postura crítica
se centraron en estudios recientes que muestran
que hay presencia de transgenes en maíces
nativos de México aún sin ser
legal la liberación comercial del maíz
transgénico por lo que llamaron a los
legisladores a establecer verdaderas medidas
de bioseguridad para detectar sus fuentes
de contaminación transgénica
y cancelarlas definitivamente antes de que
la contaminación de la riqueza genética
del maíz sea irreversible.