17 mayo 2010
DF, México —
Nestlé, la compañía más
grande del mundo en alimentos y bebidas, anunció
hoy que dejará de utilizar materias
primas que procedan de la destrucción
de los bosques tropicales. La medida ocurre
dos meses después de que Greenpeace
lanzara una campaña para denunciar
que esta corporación usa aceite de
palma en productos como KitKat.
Nestlé, la compañía
más grande del mundo en alimentos y
bebidas, anunció hoy que dejará
de utilizar materias primas que procedan de
la destrucción de los bosques tropicales.
La medida ocurre dos meses después
de que Greenpeace lanzara una campaña
para denunciar que esta corporación
usa aceite de palma en productos como KitKat.
La expansión de las
plantaciones de palma para producir aceite
y pasta para papel, es la principal causa
de la destrucción de los bosques tropicales
y turberas de Indonesia, hábitat de
numerosas especies amenazadas como el orangután.
Desde el comienzo de esta campaña,
cientos de miles de personas han contactado
a Nestlé para decirle que no van a
comprar productos relacionados con destrucción
de los bosques.
Nestlé se comprometió
a identificar y excluir de su cadena de suministro
a aquellas empresas propietarias o gestoras
de “plantaciones de alto riesgo y explotaciones
implicadas con la deforestación”. Esta
exclusión se aplicaría también
a empresas como Sinar Mas, la mayor productora
de aceite de palma y papel de Indonesia, si
no cumple con los criterios incluidos en la
nueva política de Nestlé y también
se aplicará a las relaciones de esta
empresa con grandes distribuidores de aceite
de palma, como Cargill, que continúa
abasteciéndose de Sinar Mas.
Debido al incremento de
la demanda internacional de aceite de palma
y papel y a la expansión de las plantaciones
de Sinar Mas; Indonesia tiene una de las mayores
tasas de deforestación mundial y es
el tercer país emisor de gases de efecto
invernadero, después de China y Estados
Unidos. El aceite de palma es utilizado como
ingrediente en una amplia gama de productos
de uso cotidiano, como el chocolate, la pasta
de dientes, los cosméticos y, también,
de los mal llamados “biocombustibles”.
La organización ambientalista felicitó
a Nestlé por darle un respiro a los
orangutanes e hizo un llamado a los demás
distribuidores internacionales, como Carrefour
y Wal-Mart, a hacer lo mismo.
Greenpeace seguirá
de cerca que el compromiso de Nestlé
se lleve a cabo.
+ Más
Amenazan petroleras las
aguas del Ártico
17 mayo 2010
Venecia, Louisiana, Estados unidos de america
— Sin considerar la experiencia de grandes
derrames, Shell Oil, ahora quiere perforar
en el mar de Alaska, por lo que Greenpeace
exige un alto a las perforaciones petroleras
en alta mar.
El grupo de empresas petroquímicas
y energéticas Shell Oil planea iniciar
en julio de este año nuevas perforaciones
en las aguas del Ártico a pesar de
que esta práctica está marcada
por desastres que implican una seria amenaza
para los ecosistemas como lo demuestran el
actual y todavía incontrolable derrame
de crudo que desde hace tres semanas impacta
las aguas del Golfo de México y el
ocurrido hace 20 años en las aguas
de Alaska con el vertido de cerca de 40 millones
de litros de hidrocarburo del Exxon Valdéz
cuyos daños al medio ambiente se siguen
evaluando.
"Es indignante que
mientras millones de galones de petróleo
crudo siguen propagándose en el Golfo
de México sin que se vislumbre un una
solución cercana, Shell siga adelante
con sus planes de perforación petrolera
en las aguas del Ártico de Alaska.
Como Greenpeace estamos llamando a un cese
inmediato de nuevas perforaciones petrolíferas",
dijo John Hocevar, director de la campaña
de océanos de Greenpeace Estados Unidos.
"Permitir la perforación para
avanzar en la región polar, en tanto
se vive una catástrofe ambiental en
el Golfo de México, es realmente temerario",
aseveró el biólogo marino Paul
Horsman quien realiza una evaluación
independiente del impacto del actual desastre.
Mientras que los informes
de prensa revelan que las estimaciones oficiales
sobre la dimensión del derrame en el
Golfo de México pueden estar subestimando
la cantidad del crudo vertido, Greenpeace
exigió al gobierno de Estados Unidos
tome el control y brinde información
pública confiable.
"Es difícil creer lo que estamos
escuchando de BP y del gobierno teniendo en
cuenta que algunos informes muestran, conservadoramente,
que el derrame podría ser 10 veces
más grande de lo que BP está
diciendo", dijo el director de la campaña
de clima y energía de Greenpeace Estados
Unidos, Damon Moglen.
+ Más
Industria, ONG y el gobierno
de Canadá acuerdan conservación
de bosques boreales
18 mayo 2010
Canadá — A partir de hoy, los bosques
boreales de Canadá estarán protegidos
por un acuerdo en el que participan nueve
ONG y 21 empresas que pertenecen la Asociación
de Productores Forestales de Canadá
(FPAC, por sus siglas en inglés).
El acuerdo se aplicará
sobre 72 millones de hectáreas de bosques
públicos bajo concesión de los
integrantes del FPAC, que ya gestionan dos
terceras partes de toda la superficie certificada
de Canadá, y que ahora se comprometen
a aplicar los estándares ambientales
más altos en su gestiónde esta
área, equivalente a dos veces el tamaño
de Alemania.
También se acordó que se suspenderá
la tala de cerca de 29 millones de hectáreas
de bosques donde se desarrollarán planes
de conservación para especies amenazadas,
como el Caribú. Mientras el acuerdo
esté en vigor, organizaciones como
Canopy, ForestEthics y Greenpeace suspenderán
las campañas que venían desarrollando
en contra los productos forestales y sus empresas,
sin embargo, estarán pendientes de
que se cumplan los objetivos fijados.
El acuerdo también
incluye aspectos como:
?El desarrollo e implementación
de una gestión forestal líder
a nivel mundial
?La realización de propuestas comunes
para redes de áreas protegidas y la
recuperación de especies amenazadas
?La gestión forestal completa de los
almacenes de carbono
?El apoyo al desarrollo de las comunidades
dependientes de los bosques así como
el reconocimiento de los logros de conservación
que se alcancen
Las organizaciones ecologistas firmantes,
FPAC, y las federaciones empresariales han
comenzado ya las reuniones con los gobiernos
de las provincias, el movimiento aborigen
First Nation y las comunidades locales de
todo el país en busca de su implicación
en los objetivos del acuerdo. Greenpeace espera
trabajar estrechamente con First Nation y
las comunidades aborígenes para crear
soluciones justas y equitativas que apoyen
las propuestas de conservación de sus
bosques y territorios tradicionales.